Lo ha dicho en rueda de prensa tras el Consell Executiu, durante el cual se han concentrado ante la Generalitat trabajadores de la educación para reclamar más recursos tras perder 211 millones de euros adicionales este año con la prórroga presupuestaria.
Munté ha incidido en que "no se trata de recortes, sino de una consecuencia nada querida pero inevitable por no poder disponer de nuevos presupuestos".
Ha reconocido que la prórroga no permitirá hacer todo lo que sí permitirían unas nuevas cuentas, y asegura que el Govern trabaja "intensamente" para garantizar un inicio de curso con normalidad para atender necesidades inmediatas, si bien con afectación respecto a lo previsto en las escuelas inclusivas, en los centros de alta complejidad y en sustituciones.
Además, ha asegurado que las consellerias de Enseñanza y Economía hacen "todos los esfuerzos posibles para que el próximo curso empiece desde la máxima normalidad posible", dando respuesta a una buena parte de las necesidades de las escuelas inclusivas y becas comedor, y teniendo en cuenta que aumentará el alumnado.
Ha añadido que es un trabajo que no finaliza ahora y que "necesita ser abordado con los centros", porque los colegios necesitan saber con qué dotaciones contarán en septiembre, aunque ha matizado que de momento no puede haber más recursos que los explicados por la Conselleria de Enseñanza.
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