La vicesecretaria general de UPA-UCE Extremadura, María Antonia Alcalá, ha señalado que "la de este año es una campaña complicada por el descenso de producción" que se va a registrar a causa de la climatología, que ha "castigado duramente con las últimas tormentas de granizo".
Por eso, ha criticado el "acoso desmedido" con las inspecciones "precisamente ahora que los agricultores están intentando salvar la cereza".
Ante esta situación, UPA-UCE aboga por la "proporcionalidad" en las inspecciones para garantizar que la cerecera no se vea paralizada, ya que éste "sería el remate a una campaña desastrosa", ha señalado Alcalá.
Además, desde la organización profesional agraria dejan claro que los productores "cumplen la legalidad vigente" por lo que no entienden "esta campaña desproporcionada" contra ellos: "Nos tratan como si fuéramos delincuentes", ha dicho.
En este sentido, Alcalá ha reiterado que los agricultores "únicamente quieren obtener el fruto del trabajo de todo un año para sacar adelante a sus familias", y ha lamentado los "problemas operativos" que esta situación está causando en la recolección de la cereza.
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