Empresas VIP catalanas se plantan contra Fomento por la falta de infraestructuras

"Los presupuestos en infraestructuras no son creíbles, los términos de ejecución no son realistas, sin dinero y sin papeles, las expectativas de modernización en términos de infraestructuras están abocados solo a generar frustración". Así de dura se muestra la Cámara de Comercio de Barcelona, integrada por lo más VIP del empresariado catalán, respecto a las ejecuciones presupuestarias referidas a Cataluña, donde cercanías y corredor del Mediterráneo se consideran claves.

La gran queja es la diferencia entre lo que el Estado presupuesto gastar y lo que realmente gasta en Cataluña, "ya que el cumplimiento del déficit disminuye la capacidad inversora". El Estado, en este sentido, sólo ejecutó en 2016 el 52,9% previsto en infraestructuras. Se considera un agravio que en el conjunto del Estado la media fuera del 67,3%. Algo que es recurrente durante el gobierno de Rajoy.

En 2015, en Cataluña se ejecutó el 59% de la inversión prevista en infraestructuras, mientras que en España fue del 72%, y desde la Cámara no se considera que las cosas vayan a cambiar. En 2011, la diferencia fue del 86,8% en España y el 67,7% en Cataluña. Solo en 2012, según los datos elaborados por la Cámara basados en Fomento, la inversión real en Cataluña superó en ejecución real a la media del resto de regiones: un 104,4% frente al 91,8. En 2016 se ejecutaron alrededor de 500 millones, mientras que las previsiones para 2017 superan los 1.000.

El Plan de Inversiones 2017-2020 en infraestructuras en Cataluña del Ministerio de Fomento anunció un importe global de 4.185 millones de euros a lo largo del cuatrienio, que suponen más de 1.000 millones de euros anuales de inversión en este periodo.

La prioridad declarada son los ferrocarriles, que reciben 2.542 millones de euros, de los que 1.800 millones se asignan a Cercanías. Además, también se adelantó el compromiso de dedicar otros 2.000 millones de euros al Plan de Cercanías al siguiente cuatrienio 2021 hasta 2025.

Pero para sacar adelante este tipo de proyectos, señalan desde la Cámara, se necesitan "visiones compartidas y coordinación ejecutiva entre las diferentes administraciones". En este sentido, lo que más se echa de menos es la "definición del modelo de gestión y explotación futura de la red de Cercanías".Un listado que no se cumple

Sin acordar cuál es el horizonte final imaginado para Cercanías, "difícilmente pasaremos del listado de actuaciones previstas en la relación de proyectos estratégicos que tanta falta nos hacen", señalan.

Las quejas apuntan a proyectos anunciados a bombo y platillo y a las que no se les ve agilidad. Se centran en la Cámara en señalar algunos proyectos, entre ellos, el soterramineto urbanos de Hospitalet. Se pone en cuestión la tramitación administrativa, la dotación presupuestaria y el modelo de gestión.

En cuanto al sorretamiento de la la línea R2 a su paso por Montcada i Reixac de 4 kilómetros y con una inversión estimada de 300 millones de euros, la pregunta es ¿cómo va el proyecto de construcción y el plan de ejecución de las obras? En cuanto al nuevo acceso a la T1 las preguntas son, ¿cómo se contrata, cómo se explota y quién la opera?.

Hay que tener en cuenta que estas quejas empresariales coinciden en el tiempo con el interés de Rajoy de que sean los empresarios los que den un paso al frente para parar el referéndum en Cataluña, manifestando que sería letal para la economía catalana.