Altadis anuncia bajadas de precios "para proteger sus marcas"


Altadis -propietaria de marcas como Fortuna, Nobel o Ducados- anunció este martes su decisión de bajar el precio de sus principales marcas de cigarrillos, "con el fin de proteger la competitividad de las mismas ante el agresivo movimiento de precios realizado por uno de sus principales competidores".
La semana pasada, Philip Morris -que produce marcas como Malboro, Chesterfield o L&M- decidió reducir entre 20 y 30 céntimos el precio de sus cajetillas.
En un comunicado, Altadis señala que con su decisión "defiende su liderazgo en el mercado español de cigarrillos".
Los nuevos precios fueron comunicados hoy al Comisionado para el Mercado de Tabacos y se espera que sean publicados mañana, 1 de junio, en el BOE, fecha a partir de la cual entrarían en vigor.
Tras esta medida, Altadis sitúa el precio de sus marcas más relevantes de cigarrillos rubios, Fortuna y Nobel, en 3,50 euros la cajetilla, desde los actuales 3,70, mientras que Ducados Rubio pasa de 3,50 a 3,40. Por su parte, Ducados Negro baja de 3,85 a 3,70 euros.
Desde la filial de Imperial Tobacco denunciaron que "se ha producido una actuación agresiva en el mercado", por lo que se ha visto obligada a responder.
Además, recordó que con fecha 10 de mayo anunció un incremento de 10 céntimos de euro en el precio de todas sus marcas, aumento que fue contestado en sentido contrario por uno de sus principales competidores y que se convirtió en el verdadero detonante de la presente situación.
"MUY SORPRENDIDOS"
El director de Asuntos Corporativos y Jurídicos de Altadis, Jaime Gil-Robles, señaló que "estamos muy sorprendidos por la segunda bajada en el precio realizada por uno de nuestros competidores en el plazo de dos semanas".
"Lamentamos profundamente la situación generada y confiamos en que todos los afectados tendrán claro cuál ha sido el origen de la misma, que podría producir una caída significativa en la recaudación de los ingresos del Estado y también afectar gravemente a los estancos", agregó.
En este sentido, quiso dejar claro que "nos preocupa especialmente que se generalice el malestar ocasionado entre los estanqueros por el comportamiento de algún fabricante y se pretenda hacer responsable de esta situación no deseada al resto de empresas que operamos en el sector".
Según Gil-Robles, "el nuevo escenario producido en el mercado ha incrementado aún más la presión fiscal, lo que favorece a las marcas Premium de importación y perjudica claramente a las marcas nacionales que se fabrican en España".
Altadis entiende que la solución a esta situación "no sería, en ningún caso, aumentar todavía más esa presión fiscal, ya que como ha demostrado la última subida de impuestos efectuada a principios de diciembre, ello no aseguraría una mayor recaudación y podría generar más mercado negro".

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