(ampliación) el banco de españa admite que se debería haber sometido antes a las cajas a la disciplina de mercado


El gobernador del Banco de España, Miguel Ángel Fernández Ordóñez, reconoció este martes que la reforma de la gobernanza de las cajas de ahorros y su sometimiento a la disciplina de mercado "se debería haber acometido antes".
Durante su intervención en unas jornadas financieras organizadas por "ABC" y Deloitte, Fernández Ordóñez dijo que lo óptimo habría sido poner en marcha estas reformas "en los buenos tiempos y no en medio de la crisis".
El responsable del Banco de España aseguró que si se hubiesen corregido antes estas ineficiencias, "ello habría ahorrado tener que lidiar estos años con los problemas que se incubaron entonces pero que han emergido ahora con la crisis".
El gobernador defendió además que "hubiera sido un error" inyectar capital en las entidades financieras españolas inmediatamente después de la crisis de Lehman Brothers.
"La tarea en España no era recapitalizar con urgencia sus grandes bancos, que es verdad que en otros países, por una deficiente regulación y supervisión, estaban colapsando", explicó Fernández Ordóñez.
Según el gobernador, en España lo "inaplazable" era obligar a reestructurarse y sanear unas instituciones medianas y pequeñas, como las cajas de ahorros, "alejadas de la disciplina de mercado y que habían prestado en exceso al sector inmobiliario".
En España, antes de recapitalizar, prosiguió Fernández Ordóñez, era indispensable reestructurar esas instituciones y sanear sus balances.
"Se habrían malgastado los recursos públicos si se hubiera recapitalizado antes de sanear suficientemente los balances y sin haber conseguido cambios en la gestión y reducciones de capacidad, aspectos fundamentales para que las entidades que subsistan puedan tener unas cuentas de resultados suficientemente sólidas", aseveró el gobernador.
En este sentido, admitió que "lo que sí se ve con claridad ahora es que la reforma de la gobernanza de las cajas de ahorros y su sometimiento a la transparencia y disciplina de mercado se debería haber acometido antes".
Igualmente, apuntó que se debería haber reformado una legislación de gestión de crisis bancaria que no servía para tratar entidades no mercantiles y que estaba adaptada a los requerimientos del marco normativo europeo, que prohíbe la financiación monetaria.
"Estas reformas del sector bancario, como todas las demás que se están abordando ahora (pensiones, reforma laboral...) se deberían haber hecho durante los años de expansión, cuando todo parecía ir bien y se ignoraban los problemas que acabarían surgiendo por acumular desequilibrios", afirmó.
En cualquier caso, el gobernador del Banco de España admitió que tanto las autoridades como los agentes privados "han realizado un esfuerzo muy importante en la dirección adecuada, por lo que el proceso de ajuste del sector bancario y del conjunto de la economía española está progresando razonablemente".
REESTRUCTURACIÓN
El gobernador del Banco de España manifestó que en este momento el regulador está analizando los proyectos de recapitalización presentados por las entidades financieras que así lo precisaban.
"La gran mayoría de las entidades españolas satisfacía los exigentes requisitos", apuntó Fernández Ordóñez, si bien dijo que serán finalmente 13 y no 12 las operaciones que tendrán que analizarse, en referencia a la operación fallida de Caja Mediterráneo.
En este sentido, advirtió de que la entrada de capital privado va a exigir a las cajas una "definitiva" y "clara" profesionalización de su gestión. Además, advirtió de que debe acelerarse la reforma del gobierno corporativo porque el mercado "no volverá a prestar a quienes no le garanticen una profesionalidad y un gobierno de sus instituciones equiparable al de las demás entidades".
Pero el gobernador se mostró convencido de que las entidades financieras continuarán sufriendo el estancamiento de su principal negocio que la concesión de créditos hipotecarios. Así, la demanda solvente seguirá siendo escasa.
El responsable del Banco de España cree que gracias al decreto de reforzamiento del capital de las entidades financieras se ha evitado la supervivencia "de entidades zombis que, sin su integración en las mejores, habrían acabado siendo inútiles para la provisión de crédito".

Mostrar comentarios