(ampliación) el banco de españa advierte que la "reciente volatilidad" aumenta la "incertidumbre" sobre las proyecciones


El Banco de España destaca que el “elevado ritmo de crecimiento” que está registrando la economía española “viene acompañado por una rápida creación de empleo”, aunque reconoce que “la reciente volatilidad en los mercados financieros aumenta la incertidumbre” sobre las proyecciones.
Así lo afirma en su Boletín Económico correspondiente al mes de junio, en el que se recoge la actualización de las previsiones macroeconómicas adelantadas ayer por el gobernador de la institución, Luis Linde, en el Congreso de los Diputados.
El supervisor ha mejorado tres décimas, hasta el 3,1%, su estimación de crecimiento del PIB para este 2015 y mantiene en el 2,7% la previsión para 2016.
“Durante la primera mitad del año ha continuado afianzándose el dinamismo de la economía española”, explica en el Boletín Económico, en el que se apunta que tras el aumento del PIB del 0,9% entre enero y marzo, la información coyuntural disponible indica que la actividad “podría experimentar una ligera aceleración adicional” en el segundo trimestre, hasta el 1% intertrimestral.
“Como resultado de este comportamiento de la actividad en la primera mitad del año, más positivo de lo anticipado en marzo”, el crecimiento estimado del PIB en 2015 se ha revisado al alza hasta el 3,1% en media anual, indica el organismo.
Para 2016 se espera una “continuación de la fase de dinamismo, si bien dentro de una pauta de cierta contención, que podría empezar a percibirse en la segunda mitad de este ejercicio, una vez que algunos de los impulsos expansivos recientes, como el descenso del precio del crudo y la depreciación del euro, moderen su impacto sobre las tasas de avance del PIB”, agregó el Banco de España.
Según el supervisor, “los riesgos de desviación respecto a este escenario central presentan un balance equilibrado, si bien la reciente volatilidad en los mercados financieros aumenta la incertidumbre”.
También señala que persiste alguna incertidumbre sobre el desarrollo en el área euro y ante la posibilidad de un “eventual agravamiento de los conflictos geopolíticos existentes”, que afectarían “negativamente a la senda de crecimiento”.
Asimismo, una evolución de ciertas economías tanto emergentes como avanzadas de fuera de la UE peor que la prevista podría reducir el crecimiento económico estimado para España.
En el ámbito interno, el Banco de España advierte sobre “la incertidumbre acerca de la agenda de reformas a medio plazo” ya que considera que “podría generar un descenso en la confianza de los agentes”.
Por el contrario, el organismo afirma que “no se puede descartar” que algunos de los impulsos presentes en la actualidad “prolonguen sus efectos más allá de lo que contempla este escenario central”, lo que permitiría un mayor crecimiento del PIB.
EMPLEO
Por otro lado, apunta que las actuales proyecciones contemplan la prolongación del proceso de “intensa creación de empleo y de moderación salarial” que se viene observando desde el inicio del proceso de recuperación de la economía española. Este avance del empleo comportará, según el organismo supervisor, “reducciones adicionales de la tasa de paro”, que, no obstante, se verán “atemperadas” por un “modesto aumento” de la población activa”.
En cuanto a la evolución de los precios, el Banco de España subraya que las estimaciones “apenas han cambiado” respecto a marzo, con unas variaciones “muy reducidas” en los factores externos. Así, añade que los datos de los últimos meses “han confirmado, en líneas generales, las proyecciones formuladas entonces”.
De esta forma, la institución gobernada por Linde considera que habrá un repunte de la inflación, que, en parte, estará motivado por el “moderado encarecimiento del crudo al que apuntan los mercados de futuros y, en parte, por un incremento de los precios del componente subyacente, como consecuencia del impacto de la depreciación cambiaria y de la reducción del grado de holgura en la economía”.
En concreto, prevé que el IPC se sitúe en valores positivos en el tramo final de este año, aunque en el plazo de la proyección (2015 y 2016) no alcanzará aún “niveles próximos al 2%”.
En términos del deflactor del PIB, el Banco de España estima que los precios podrían crecer, por término medio, un 0,3% en 2015 y un 0,6% en 2016.

Mostrar comentarios