Axesor pide aumentar el peso de la industria para evitar déficit estructural

Ruth del Moral

Madrid, 22 nov.- La compañía española especializada en información y gestión de riesgo crediticio Axesor advierte de que se debe aumentar el peso de la industria y las exportaciones de bienes con el fin de reducir la dependencia financiera de España con el exterior y evitar que el déficit comercial se haga estructural.

En un informe, al que ha tenido acceso EFE, la agencia mediadora de riesgos alerta de que la posición inversora deudora internacional de España se encuentra en niveles cercanos al 98 % del PIB, frente al 40 % de media que registran los países de la Unión Europea.

Para corregir esta posición deudora Axesor urge a aumentar la producción de bienes comerciables y el peso de estas exportaciones, ya que asegura que si representaran el 30 % del PIB en diez años, el potencial de mejora de este sector se cifraría en más de 80.000 millones de euros.

Durante una entrevista con EFE, el responsable del Gabinete de Estudios Económicos de Axesor, Javier Ramos, añade que hay que apostar por un superávit permanente de la balanza de pagos por cuenta corriente y por un "ajuste en el sector público".

Explica que se puede mejorar la eficiencia del gasto para reducir el déficit público y tener más capacidad de bajar los impuestos que pagan las empresas vía cotizaciones sociales "abaratando así el coste en las contrataciones".

El estudio "El crecimiento del sector de bienes exportables: un compromiso ineludible para la economía española" aboga por cambiar la estructura productiva y hacer un sector industrial más fuerte para la próxima década, y cree que sería "razonable" un mayor apoyo estatal a subsectores industriales a través de ayudas, subvenciones o incentivos fiscales.

Aunque la industria manufacturera sigue siendo el sector que más ayudas públicas recibió en 2013 (514,7 millones de euros, el 34 % del total), éstas han disminuido un 75 % respecto a 2009 (2.415 millones de euros).

"Todo lo que permita a las empresas, sobre todo a las pymes, que accedan al mercado exterior es beneficioso, sean ayudas o incentivos", señala Ramos, que también apuesta por una mejor redistribución de los beneficios empresariales y alerta de que la falta de reinversión empresarial daña la competitividad.

El estudio de Axesor cree que a corto plazo se necesita una devaluación real de la economía a través de una contribución de los salarios y de los márgenes de beneficios.

"La bajada salarial no se traduce en ganancias de competitividad vía precios, ya que éstos bajan y aumentan los márgenes de beneficio de las empresas", indica Ramos, tras ver necesarias más reinversiones productivas.

En este sentido, explica que el temor a la falta de crédito bancario ha provocado la falta de inversión de los excedentes empresariales y valora la financiación alternativa bancaria (el capital riesgo) como una fórmula más fácil de acceso al crédito.

Y es que el crédito que se destinó a la construcción y al sector inmobiliario en 2008 ascendió a 469.879 millones y fue tres veces superior al dirigido a la industria.

"Es el turno de que la industria ocupe parte del vacío dejado por el sector de la construcción", indica el analista, que a su vez reivindica una mayor capacidad para captar demanda externa y generar una demanda interna sostenida y no dependiente del endeudamiento.

Ramos incide en que las importaciones son superiores a las exportaciones y un patrón de déficit comercial estructural es insostenible para la economía española.

De hecho, el sector exterior lleva siete años contribuyendo de forma positiva al PIB y el analista de Axesor recuerda que el Banco de España prevé este año una contribución negativa del 0,1 % al PIB.

"Los países europeos pueden amenazar la contribución de la demanda externa al PIB", asegura, ante el frenazo de la economía de la zona euro.

Por ello, entre las propuestas de Axesor está la de una mayor inversión del sector privado en innovación, que ha demostrado que mejora el porcentaje de eficiencia, y un impulso a la movilidad de investigadores entre universidades y empresas.

También, fomentar la inversión industrial en el exterior con el fin de crear plataformas exportadoras.

El sector de bienes exportables representa el 19 % de los empleos y el 18 % del valor añadido del total de las ventas al mundo.