Cameron quiere abandonar la reforma de los lores para centrarse en economía

  • El primer ministro británico, David Cameron, anunciará en breve que abandona los planes sobre la reforma de la Cámara de los Lores para centrarse en el crecimiento económico y la creación de empleos, informa hoy "The Guardian".

Londres, 3 ago.- El primer ministro británico, David Cameron, anunciará en breve que abandona los planes sobre la reforma de la Cámara de los Lores para centrarse en el crecimiento económico y la creación de empleos, informa hoy "The Guardian".

La decisión, que pude ser anunciada este mismo mes, puede crear tensión con sus socios de la coalición, puesto que el proyecto de ley es apoyado por los liberaldemócratas, que lo habían defendido a capa y espada antes de las elecciones generales de mayo 2010.

El proyecto sobre la reforma de los Lores establece la reducción de su número, a 450 de los 775 actuales, y que el 80 % sea elegido en las urnas por un periodo de 15 años, pero ha suscitado el rechazo de un sector de los conservadores, que alega que los cambios provocarán una crisis constitucional.

Según el diario "The Guardian", Cameron ha llegado a la conclusión de que el proyecto no contará con el respaldo de un sector de los "tories", por lo que quiere utilizar el espacio que dejaría el debate de este proyecto para otros sobre economía.

El hueco parlamentario estará dedicado a "empleos, empleos y empleos", dijo al periódico una fuente del Partido Conservador al tanto de las conversaciones sobre esta polémica reforma.

Al parecer, los "tories" celebraron ayer una serie de reuniones en Downing Street, residencia oficial de Cameron, para abordar el proyecto sobre la Cámara de los Lores, cuya función es revisar la legislación elaborada en los Comunes.

De acuerdo con la información, muchos conservadores han criticado la legislación por considerar que la población la considera irrelevante en momentos en que el país está sumido en un duro programa de recortes, desempleo y recesión económica.

El Reino Unido atraviesa una recesión tras encadenar tres trimestres consecutivos de contracción económica, el primero de ellos a finales de 2011, cuando el PIB se contrajo un 0,4 %, y durante los dos primeros trimestres de 2012.

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