Lisboa, 11 abr.- Las fotografías "oportunistas" realizadas por Carlos Saura durante los rodajes de sus filmes musicales componen la exposición que homenajea desde hoy en la capital portuguesa al realizador como último Premio Luso-Español de Arte y Cultura.
Las imágenes de la película por la que le fue concedido el premio "Fados" (2007) son mayoría en esta muestra de cincuenta fotografías y siete dibujos realizadas a lo largo de 32 años, que se expone en el Instituto Cervantes de Lisboa hasta el 28 de junio.
"Yo soy un fotógrafo oportunista", explicó a Efe el polifacético artista, que aprovecha los rodajes y sus ensayos previos para obtener imágenes "un poco sacadas de lugar" y sobre cualquier tema.
"Es lo mismo con la familia, un perro, una calle; todo lo que me apetece; y, de paso, hago una película", afirma Saura, que ejerció como fotógrafo profesional antes de decidirse por la dirección cinematográfica.
Además de los rostros de los cantantes lusos Mariza o Amalia Rodrígues, en la muestra también aparece Aída Gómez, la "Salomé" de su película de 2002; el cantaor Farruco, quien apareció en "Flamenco" (1995); o Miguel Poveda, retratado en su participación en "Flamenco Hoy" .
Junto a estas imágenes hay instantáneas, tanto en color como en blanco y negro, de la trilogía sobre el flamenco compuesta por "Bodas de sangre"(1981), "Carmen" (1983) y "El amor brujo"(1986).
En la concesión del último premio anual Luso-Español, el jurado destacó la "calidad" e "importancia" de su cinta sobre el genero musical portugués, no solo para la cultura y el arte ibérico, sino para su valoración internacional, un hecho que Saura todavía aprecia cuando le hablan de ella en sus viajes.
El ganador de numerosos premios cinematográficos, desde el Goya en España al León de Plata en Berlín, se siente orgulloso de ese trabajo.
La cinta, en la que el fadista luso Carlos do Carmo colaboró "como mentor", contribuye "a que el fado siga existiendo con tantas posibilidades en el presente como en el futuro", abunda Saura.
En sus ediciones anteriores, el Premio Luso-español, que se concede cada dos años desde 2006, recayó en el poeta portugués José Bento, el filólogo y escritor zamorano Perfecto Cuadrado (2008) y el arquitecto luso Alvaro Siza Vieira (2010).
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