Cayo Lara dice que si Zapatero no cambia los trabajadores le cambiarán a él

Logroño.- El coordinador general de Izquierda Unida, Cayo Lara, ha rechazado que se asocie la huelga general del próximo día 29 con una convocatoria electoral "porque lo que toca ahora es que Zapatero cambie su política económica", aunque cree que "si no lo hace, los trabajadores le cambiarán a él".

Lara ha hecho estas manifestaciones en Logroño, donde ha ofrecido una conferencia de prensa en la que se ha referido a la postura de Izquierda Unida sobre la huelga general y ha recordado que "ya dijimos hace meses que era necesaria, nos hubiera gustado no tener razón, pero hay más paro y los sindicatos han ejercido ese derecho".

Ha subrayado que la huelga general no es una petición de elecciones sino de un cambio en la política económica del Ejecutivo, "y si la huelga es un éxito Zapatero tendrá que girar, si no lo hace será ciego y sordo".

"En el campo se dice que cuando un tonto sigue una linde, se acaba la linde pero el tonto sigue. Espero que el día 29 el pueblo le diga a Zapatero que se ha terminado la linde y que tiene que cambiar, si sigue -con su actual política-, él verá si vienen otras cosas", ha dicho.

En cualquier caso "los gobiernos los cambian las elecciones, y si la política económica no cambia los trabajadores de este país terminarán por cambiar a Zapatero", ha insistido.

Cayo Lara ha definido la situación actual como un momento en el que los poderes económicos "les quieren robar a nuestros hijos los derechos que conquistaron nuestros padres".

"La reforma laboral es solo abaratar despido y cargarse la negociación colectiva", ha dicho, aunque "luego se vislumbran otras cosas, como ampliar la jubilación, el copago de medicamentos o la privatización de la sanidad".

Cayo Lara ha subrayado que "hay una salida a la crisis distinta", que fundamentalmente pasa por perseguir el fraude fiscal y hacer aflorar los 70.000 millones de euros que se defraudan a la Hacienda Española "porque en este país solo pagamos quienes tenemos una nómina, pero si se persiguiera eso habría recursos suficientes".

Lara ha concentrado sus críticas en la reforma laboral y la posibilidad de ampliar al edad de jubilación, se ha preguntado si los empresarios van a contratar a gente de 65 años y ha asegurado que "quieren cargarse la negociación colectiva y que pacte sus condiciones cada trabajador con su empresa, sin convenio colectivo".