CCOO apuesta por oferta que garantice el empleo y nueva planta de Cacaolat

Madrid, 8 sep.- La Federación Agroalimentaria de CCOO ha afirmado que en el caso de Cacaolat es fundamental y prioritario apostar por el proyecto empresarial que más y mejor empleo garantice y que incluya la construcción de una planta nueva en Barcelona que asegure las actuales líneas de producción de la fábrica

El sindicato ha mostrado en un comunicado su extrañeza por el conflicto generado en el caso Cacaolat, cuando a su juicio su estrategia y objetivo ha sido "velar de manera coherente por los intereses de todos los trabajadores de las diferentes empresas del grupo Nueva Rumasa en su globalidad".

Un objetivo que, ha explicado, va más allá de "la localización de los centros de trabajo, de los intereses de determinados grupos de presión y de estamentos administrativos y judiciales que se están generando en torno a la situación actual de Cacaolat".

CCOO responde así a la situación creada en el caso Cacaolat en la que el Juzgado Mercantil número 6 de Madrid, que gestiona el concurso de acreedores de Clesa, ha puesto a la venta el 95 % de las acciones que esta empresa posee en su filial de batidos, mientras que el de Barcelona que, lleva la suspensión de pagos de la empresa catalana, lo ha hecho respecto a la unidad productiva.

El juzgado de Madrid, que puso como condición para admitir ofertas que el precio cubriera un mínimo de 20 millones de euros, ha recibido una propuesta de Corporación Alimentaria Peñasanta, propietaria de Central Lechera Asturiana, por 20,05 millones.

Además, ha recibido otra oferta de la firma de capital riesgo Eneas Capital, aunque en esta caso no llega al importe mínimo establecido como tope por el juzgado para ser admitida.

El sindicato ha considerado "importante definirse por el proyecto empresarial que más futuro y garantías ofrezca" y que, además de una planta nueva en Barcelona, ofrezca un compromiso por el I+D+i en nuevos productos en este segmento de consumo a través de una sólida red comercial como elemento esencial "para la continuidad de la empresa en Barcelona y Aragón".

En el proceso de Barcelona son cinco las empresas interesadas en la compra de la unidad productiva, Vichy Catalán, que ha defendido que la venta de Cacaolat se haga desde Barcelona, Corporación Alimentaria Peñasanta, Eneas Capital (ambas también ofertaron en Madrid), Roures Reenginnering y la firma de capital riesgo Victory Corporate.