Las fiestas del Año Nuevo lunar ha hecho que el banco central chino (PBOC)inyectara este jueves 340.000 millones de yuanes más (47.000 millones de euros) en su sistema financiero. Con este movimiento se amplian sus intervenciones masivas de capital en respuesta a la creciente necesidad de liquidez que se crea en este festejo.
El PBOC ya había anunciado el martes la inyección de 440.000 millones de yuanes en los bancos y repitió la operación de nuevo este jueves, también mediante reportos a siete días y a 28 días.
La institución monetaria ya inundó de liquidez los establecimientos bancarios la semana pasada con inyecciones por más de 1,3 billones de yuanes en total a través de acuerdos de refinanciación y otras herramientas de crédito.
La demanda de dinero en efectivo explota habitualmente en el país justo antes del Año Nuevo chino (el año del mono comenzará a principios de febrero). En este época, las empresas pagan a los empleados sus salarios y primas anuales, y los chinos intercambian entre ellos regalos y "sobres rojos" con aguinaldos.
El temor a una falta de liquidez puede conducir a los bancos a mostrarse más reticentes a separarse de sus fondos y provocar, de rebote, un encarecimiento general del crédito que podría perjudicar a empresas y a la economía real. El PBOC busca evitarlo a cualquier precio, en un contexto de estancamiento de la actividad.
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