Colonial da el pistoletazo de salida a la refinanciación de las inmobiliarias

A mediados de enero, el presidente de la Asociación Hipotecaria Española (AHE), Santos González, aseguraba que la deuda del sector inmobiliario con las entidades financieras ascendía a 325.000 millones de euros, la mitad de la cual se vinculaba a la compra de suelo. La cifra es casi una tercera parte del Producto Interior Bruto (PIB) de España, un peso casi insostenible para la banca nacional, lo que ha obligado a las inmobiliarias a replantearse sus agujeros financieros y poner en marcha un proceso de refinanciación. Hasta ayer las tres firmas más importantes del sector (Reyal Urbis, Metrovacesa y Colonial) mantenían abiertos sus planes de reestructuración. Pero Colonial se ha desbancado en solitario y ha roto el hielo.

La inmobiliaria presidida por Juan José Bruguera Clavero se ha tirado a la piscina. El proceso de reestructuración se ha hecho esperar un poco más de lo previsto inicialmente, pero tiene su propio final feliz. En diciembre, Colonial aseguraba que la aprobación del plan de refinanciación de su deuda, que asciende a 4.900 millones de euros, no se produciría hasta principios de año. Y así ha sido.

Como adelantaba ayer lainformacion.com, el consejo de administración de Colonial anunciaba a los accionistas de la compañía que la deuda se segmentará en tres partes, según  el plan diseñado por Lazard. Por un lado, la banca acreedora de Colonial, liderada por Banco Popular, La Caixa o Royal Bank of Scotland, se comprometerá a suscribir una nueva ampliación a través de la cual capitalizarán parte de la deuda: unos 1.700 millones de euros aproximadamente. Este primer paso reordenará el 35% de la deuda total. Sin embargo, necesitará contar con la aprobación de la junta de accionistas.

Otro de los brazos de la reestructuración será la creación de un 'banco malo', para que asuma los activos imposibles de cobrar. Para crear esta filial la inmobiliaria tendrá que destinar unos 1.000 millones de euros. Un desembolso que merece la pena porque con garantiza no afectar a la matriz y no poner en riesgo el reflote financiero. Sin embargo, será otra sociedad la que se haga cargo de los 2.200 millones restantes -el groso de la deuda-, donde la firma aglutinará todos sus inmuebles: los edificios de oficina en renta que tiene en ciudades como Madrid, Barcelona o París. Los ingresos derivados de estos activos cubrirán, con creces, la amortización de esta parte de la deuda.

El mercado de valores ha recibido con los brazos abiertos la noticia. Inmobiliaria Colonial fue el valor que más subió en el mercado continuo, tras dispararse un 9,8% al cierre de sesión, un auténtico rally bursátil y además en solitario. ¿Una prueba de que está mejorando la confianza en el sector? A medias. Aunque la firma de Juan José Bruguera Clavero se ha revalorizado un 9,3% en los últimos tres meses y más de un 15% en el último semestre, en tan sólo cuatro semanas ha perdido un 13,56% de su valor. Sin embargo, ahora la firma tiene un nuevo marco financiero asegurado, por lo que podrían aumentar sus expectativas.