Corbacho condiciona el abaratamiento del despido a eliminar los contratos temporales

  • El ministro de Trabajo tiene un cheque de 292 millones dirigidos a bonificar la contratación de jóvenes, discapacitados y mujeres maltratadas, colectivo que el Gobierno quiere impulsar dentro del mercado laboral, un mercado que en enero ha superado los cuatro millones de parados.
R. Ugalde

Reforma laboral sí, pero no a cualquier precio. Es la conclusión que se desprende de la intervención del ministro de Trabajo, Celestino Corbacho, durante su comparecencia de hoy ante la Comisión de Trabajo.

En concreto, a todos aquellos que plantean rebajar la indemnización por despido fijo, Corbacho les ha preguntado: "¿Están dispuestos a derogar la contratación temporal en España? Si la respuesta es no, ya les anticipo que con una contratación temporal como la que tenemos y una indemnización de 8 días" no se va acceder a sus peticiones.

Este planteamiento está en línea con la afirmación realizada por Emilio Olabarría, portavoz del PNV, quien ha asegurado que "el despido es gratuito en el Estado español", porque se tiene a las plantillas con contratos temporales, en lugar de fijos.

Además, el ministro de Trabajo ha insistido en que "abaratar el despido no es la solución" y ha recordado que cuando aquí se dice que el despido escaro, no se dice que en aquellos países donde es más barato también esmás difícil despedir", ha señalado. Sin querer dar nombres, pero tomando como referencia "a ese país que todos ponen como ejemplo de flexibilidad y movilidad", sufre entre 15 y 20 puntos más de presión fiscal que España, lo que lleva a Corbacho a concluir que "no hay flexibilidad si no se incrementa la seguridad".

Cambio en la política de EREs

Con este razonamiento, el ministro insiste en poner sobre la mesa del debate todas las caras de la moneda, no sólo una, como también se está haciendo con los Expedientes de Regulación de Empleo (ERE). Férreo defensor de los ERE de suspensión, en lugar de los indefinidos, Corbacho también ha abogado por centrar los recortes que necesitan las plantillas en reducir las horas de trabajo por empleado, en vez de sesgar radicalmente puestos de trabajo.

"¿Qué ocurre cuando los ajustes son por tiempo, no por plantilla?", ha preguntado, con la clara respuesta de que esta fórmula permite mantener mayores tasas de empleo. Como ejemplo ha citado a Alemania, donde 1,4 millones de trabajadores están haciendo un ajuste de horas. Ese recorte de tiempo, además, va acompañado en muchas ocasiones de formación, lo que permite a la empresa alcanzar deducciones del 100%, según el ministro.

En España, 362.000 trabajadores se han beneficiado de EREs de suspensión, lo que supone un incremento del 1.100%, frente al comportamiento a la baja de las extinciones.

No obstante, nuestro país sigue encabezando el ránking de desempleados, hasta el punto de haber superado la psicológica barrera de los cuatro millones de parados. Esta cifra se puede concluir de sumar los más de 100.000 empleos que se han destruido en enero, según las cifras que ha desvelado Corbacho, a los 3,92 millones con que se cerró el pasado mes de enero.

Estas estadísticas son las recogidas por el Inem, cuyos cálculos sin inferiores a los computados por le EPA (Encuesta de Población Activa), que cifró en 4,12 millones el número de parados al cierre de septiembre. El jueves dará a conocer el total de 2009.

Modificación de las bonificaciones

Dentro de la política de bonificaciones que emplea el Gobierno para incentivar la contratación de algunos colectivos, Corbacho ha adelantado que cuenta con un cheque de 292 millones de euros dirigido a beneficiar a los jóvenes, mujeres maltratadas y discapacitados.

Además, ha adelantado que se va a replantear la política de bonificaciones actuales y que dentro del nuevo marco laboral estas ayudas se basarán en tres pilares: quiebra de la universalización de las bonificaciones, para concentrarlas en los colectivos que realmente las necesiten, concederlas por periodos concretos, y evaluar su impacto al final de este plazo, con la posibilidad de retirarlas si el objetivo buscado no se consigue.

En España existen 34 tipos de bonificaciones, que permiten reducir costes en la contratación, de los cuales se han beneficiado a 40 millones de contratos desde 2006, según las cifras dadas por Corbacho. Aunque el futuro de estas ayudas van a estar condicionadas a resultados: "Si dentro de dos años las medidas no dan los resultados, entonces hayque derogarlas y llevar esos recursos a otro ámbito de las políticasactivas", ha advertido.

Otro aspecto donde el ministro de Trabajo ha dejado clara su postura de cara al nuevo marco laboral es en los salarios, a los que exime de ser responsables de la baja productividad española. "Muchos de los países con mayor competitividad tienen mayores salarios", ha asegurado, para añadir que el verdadero problema la productividad está en la formación, una medida que quiere impulsar.

Ampliar los 420 euros

Donde sí existe un problema real, aunque Corbacho esquiva dar cifras exactas, es en la economía sumergida. Una batalla que el ministerio de Trabajo ha decidido combatir destinando el 40% de todas la actuaciones de inspección a combatir esta lacra. En 2009, estas acciones permitieron recuperar cerca de 1.000 millones de euros.

Aunque oficialmente Corbacho ha dejado al Gobierno en su conjunto tomar una decisión sobre el nuevo marco laboral, sí que ha adelantado que, en su opinión, el sector público debe animar la inversión, pero no ir a generar empleo directo. "Los recursos deben dirigirse a animar la inversión para que, a través de la inversión, se cree empleo".

Del mismo modo, ha defendido la red de protección social, incluso en épocas de bonanzas, pero se ha mostrado partidario de ir trasladando el dinero de las políticas pasivas a políticas activas.En esta línea, aboga por ampliar la prestación de 420 euros para los nuevos parados, pero no para aquellos que ya se han acogido a esta medida.

Mostrar comentarios