Dijsselbloem: "Discutiremos con el objetivo de llegar a acuerdo sobre Chipre"

Bruselas, 15 mar.- El presidente del Eurogrupo, Jeroen Dijsselbloem, afirmó que los ministros de Economía y Finanzas de la zona del euro discutirán hoy la situación de Chipre, a fin de llegar a un acuerdo sobre los elementos de la ayuda financiera solicitada por ese país.

"Vamos a escuchar lo que (los expertos de la troika) han encontrado en Nicosia y luego discutiremos con el objetivo de llegar a un acuerdo, veremos qué lejos llegamos", dijo Dijsselbloem a su llegada a la reunión extraordinaria del Eurogrupo convocada en Bruselas para abordar la situación de Chipre.

Los diecisiete miembros de la zona del euro revisarán los avances en las negociaciones entre Nicosia y la troika -Comisión Europea, Fondo Monetario Internacional (FMI) y Banco Central Europeo- que esta semana ha llevado a cabo una misión en la isla para hablar con el nuevo Gobierno chipriota sobre las condiciones del rescate.

Dijsselbloem señaló que desconoce a cuánto ascenderá el monto de la ayuda, asunto que será la "primera cuestión a abordar" si se logra un acuerdo sobre la concesión de la asistencia a Nicosia.

El presidente del Eurogrupo explicó que el objetivo de esta ayuda es "asegurar la estabilidad de la zona del euro y permitir que Chipre vuelva a encontrar un camino sostenible".

"Por supuesto que estamos todos infelices porque Chipre necesita ayuda (...), pero vamos a intentar encontrar una buena solución para el país", aseguró.

Por su parte, la directora gerente del FMI, Christine Lagarde, declaró a su entrada a la reunión: "todo lo que sé (sobre el rescate) es que no queremos una tirita, queremos una solución que dure y que sea sostenible".

Hasta el momento, los socios de la zona del euro no han logrado llegar a un consenso sobre la concesión de la ayuda financiera que Nicosia solicitó este verano, ante las sospechas de que el país no ha cumplido durante los últimos años con las normas contra el blanqueo de capitales, lo que Chipre niega rotundamente.

También esperaban a la celebración de las elecciones generales de finales de febrero para entablar conversaciones con un nuevo Gobierno y desencallar las negociaciones.