Ecologistas en acción da un "suspenso rotundo" a españa en protección de la biodiversidad

Ecologistas en Acción da un "suspenso rotundo" a todas las administraciones españolas en lo que se refiere al cumplimiento de los compromisos en la protección y conservación de la biodiversidad.
La organización ecologista presentó este miércoles, en rueda de prensa, el informe 'La Conservación de La Biodiversidad a Examen', en el que se evalúa el cumplimiento de los compromisos multilaterales del Estado español para la protección de la naturaleza.
La conclusión del estudio es que no se están haciendo los deberes y que la tendencia es a empeorar en los próximos años, ya que hasta ahora sólo se está avanzando en cinco de las veinte metas a las que hay que llegar en esta materia.
Según recordó Theo Oberhuber, coordinador del área de Conservación de la Naturaleza de Ecologistas en Acción, el Gobierno español firmó el Convenio de Diversidad Biológica de Naciones Unidas, por el que se comprometió a frenar la pérdida de biodiversidad aplicando las llamadas veinte Metas de Aichi.
El plazo para aplicar esas metas vence en 2020, una fecha a partir de la cual la pérdida de biodiversidad podría ser irreversible, aseguró Oberhuber.
En el informe, Ecologistas en Acción analiza, a través de 40 indicadores ambientales, económicos y sociales, el grado de aplicación actual en el Estado español de esas metas. Analiza, además, la tendencia de cumplimiento en los próximos años, que serán decisivos.
Según Alejandro González, coautor del estudio, el resultado es alarmantemente negativo, ya que únicamente en cinco metas existe un avance en el cumplimiento, aunque claramente insuficiente, mientras que en 14 el avance ha sido nulo o muy escaso.
González recalcó que más preocupante todavía es que la tendencia, en general, sea también negativa, pues sólo en seis de las diecinueve metas evaluadas existe una tendencia positiva.
El informe señala como principal justificación de este "escasísimo" avance la falta de acción contra las causas subyacentes a la destrucción de la naturaleza. Estas causas, fundamentadas en un sistema económico que explota el medio natural muy por encima de los niveles sostenibles, requieren de un cambio de mentalidad y de modelo de producción y consumo, según la organización.
El estudio advierte de que aún no se valora suficientemente la biodiversidad, no se tiene en cuenta en la inmensa mayoría de las decisiones políticas y no se destinan a ella recursos suficientes, mientras siguen existiendo subsidios perjudiciales para la naturaleza.
Ecologistas en Acción considera que resulta fundamental actuar sobre la protección de especies amenazadas, la gestión de los espacios naturales protegidos o las acciones sobre la calidad del medio ambiente, pero mientras que no se condicionen todas las políticas sectoriales a la conservación de la biodiversidad no se conseguirá.
El informe señala que la actual crisis económica está provocando una cierta mejora en cuestiones ambientales, por ejemplo la ligera reducción de la huella ecológica o la decreciente tendencia en las emisiones de gases de efecto invernadero, pero se trata de una mejora circunstancial.
En cualquier caso, indica que, además, esa misma crisis está provocando un "gravísimo" abandono de las políticas ambientales, que se manifiesta en los recortes en recursos económicos y personal destinado a la conservación de la naturaleza, en la falta de aplicación de la normativa ambiental por parte de las administraciones y en la consideración general de que el medio ambiente es "un lujo que en crisis económica no nos podemos permitir".
Oberhuber subrayó que las advertencias de la ciencia son contundentes: si no se actúa ya para preservar la biodiversidad, se traspasará un punto de no retorno en el cual los sistemas naturales se volverán impredecibles y sin posibilidad de recuperarse con las graves consecuencias que ello puede provocar, también económicamente.
Por todo ello, Ecologistas en Acción exige a todas las administraciones ambientales que adopten nuevas y eficaces medidas para lograr que en 2020 se cumpla el objetivo mundial de detener la destrucción de la diversidad biológica.