2013: A la búsqueda de oxígeno

  • Existe un anhelo generalizado de que 2013 suponga un respiro para la economía española y para la de las familias tras los duros momentos vividos en el año que termina.

José Miguel Blanco

Madrid, 14 dic.- Existe un anhelo generalizado de que 2013 suponga un respiro para la economía española y para la de las familias tras los duros momentos vividos en el año que termina.

Gobierno, partidos, instituciones y agentes sociales confían en que ese deseo se convierta en realidad y haya bocanadas de oxígeno en forma de datos que den la razón a las palabras del presidente del Gobierno, Mariano Rajoy, en las que aseguró que lo peor había pasado.

Pero todos son conscientes de las enormes dificultades que heredará el próximo ejercicio, ante el que, a la hora de hablar de perspectivas, se piensa inmediatamente en el ámbito económico. Pero llega también cargado de interrogantes sobre lo que acontecerá en una serie de aspectos políticos.

Una muestra: la senda que trazará el presidente de la Generalitat, Artur Mas, tras el revés de las urnas a su apuesta soberanista, o la hoja de ruta del PSOE ante las voces disconformes con no celebrar primarias hasta sólo pocos meses antes de las próximas elecciones generales.

Las incógnitas económicas se resumen en una: ¿será mejor 2013? La respuesta no podrá darse hasta dentro de un año, y, por ahora, hay que echar mano de las previsiones.

Las del Gobierno todavía apuntan a la recesión al augurar que la economía se contraerá un 0,5 por ciento del PIB.

Pero las de otros organismos e instituciones, como las de la OCDE o la Comisión Europea, pronostican que esa reducción será del 1,4 por ciento y aumentan la tasa de paro prevista por el Gobierno (un 24,3 por ciento de la población activa).

No pretende el Ejecutivo que sus cifras sean la Biblia, pero sí asegura que trabajará para que se cumplan y yerren las otras más pesimistas.

A ello cree que contribuirá el hecho de que van a ir notándose de forma paulatina los efectos de las reformas que ha ido aprobando.

Aunque el Ejecutivo aplaza a 2014 el crecimiento y la creación de empleo, sí atisba que en la última parte del próximo año habrá signos evidentes de mejoría de la economía.

Algo que puede estar condicionado por el cumplimiento o no del objetivo de déficit pactado con Bruselas para 2012 (el 6,3), un dato que se conocerá ya entrado el próximo ejercicio y en el que tienen mucho que decir las comunidades autónomas.

Y no puede descartarse una flexibilización de ese objetivo de déficit por parte de la Unión Europea, que para 2013 se ha cifrado en el 4,5 por ciento.

Con independencia de ello, la Comisión Europea ha garantizado que no exigirá más ajustes el próximo año a España al considerar que se han adoptado ya medidas efectivas para reducir el déficit y restaurar la sostenibilidad de las finanzas públicas.

Con la vista puesta en Bruselas, Rajoy ha asegurado que no descarta pedir ayuda financiera a la UE (el denominado "rescate suave") si lo considera conveniente para los intereses de España.

En ello tendrá mucho que decir la evolución de la prima de riesgo, que, a pesar de haberse relajado después del verano, sigue en unas cifras que el Ejecutivo considera excesivas.

No habrá nuevas subidas de impuestos si hay que atenerse a lo dicho por el Ejecutivo.

Tras dos huelgas generales en el primer año de Rajoy, los sindicatos tienen en su mano decidir si harán nuevas convocatorias de este tipo. Lo que sí es previsible es que continúen las protestas en sectores como la educación y la sanidad.

No hay visos de acercamiento alguno en esos u otros asuntos entre Gobierno y PSOE, aunque tras las duras críticas que ha recibido la reforma educativa auspiciada por José Ignacio Wert, el Ejecutivo ha asegurado que no está cerrada.

Los socialistas tienen cita en otoño. Será cuando se celebrará su aplazada Conferencia Política que tiene que abordar el debate de las ideas.

El de las personas también dará juego. Mientras la cúpula de Ferraz, con Alfredo Pérez Rubalcaba a la cabeza, pretende que las primarias para elegir el candidato a presidente del Gobierno se celebren meses antes de las generales, otros dirigentes, como Carme Chacón, son partidarios de que esa decisión se adopte mucho antes.

Muy alejada parece la posibilidad de que en 2013 Gobierno y Generalitat de Cataluña puedan mejorar unas relaciones ahora congeladas y que están a la espera de que Artur Mas aclare sus planes de futuro y si, tal y como le está exigiendo ERC, su carta de navegación pasa por una consulta a los catalanes en el año 2014.

Si fuera así, no hay entendimiento a la vista más allá del ofrecimiento del Fondo de Liquidez Autonómica (como al resto de comunidades), pero siempre que Cataluña cumpla sus compromisos.

Será también 2013 el año en el que Iñigo Urkullu marcará la línea de actuación en el regreso del PNV a Ajuria Enea. Por vez primera, un lehendakari dará sus primeros pasos sin la amenaza de ETA.

Por su parte, los pasos del Gobierno de Rajoy conservarán la guía reformista. Queda la duda de si, a estas alturas de 2013, todos los actuales ministros seguirán conservando sus carteras.

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