El banco de españa advierte de que la recuperación depende de la velocidad de los ajustes


El Banco de España apuntó hoy que a lo largo de 2013 se producirá una "paulatina" superación del episodio de recesión de la economía española, si bien su afianzamiento dependerá de la velocidad de los ajustes, así como del contexto externo.
Según consta en el Informe Anual 2012 del organismo que gobierna Luis Linde, la recesión alcanzó su fase "más restrictiva" en el paso de 2012 a 2013, si bien debido al "amplio" conjunto de medidas se logró detener la espiral negativa del verano.
El alivio de las tensiones financieras sobre el euro y el avance de los procesos de reforma permitieron reducir las presiones sobre el coste de la deuda pública española y reabrieron los mercados de financiación exterior, procesos que han continuado en 2013, si bien la situación "no se ha normalizado plenamente".
"Las perspectivas de afianzamiento de una recuperación dependen del contexto externo y del avance en los ajustes en los que está inmersa la economía española", apunta el regulador.
En esta línea, insiste en que las reformas son "fundamentales" para la recuperación de la confianza y el mantenimiento de la financiación externa.
En este contexto, el Banco de España entiende que la economía española se encuentra inmersa en un proceso de ajuste "muy profundo" en medio de circunstancias "muy adversas".
"Las condiciones financieras continúan siendo muy estrictas a pesar del alivio de las tensiones en el área del euro, y no existe margen de maniobra significativo para el recurso a las políticas macroeconómicas de estímulo de la demanda", sostiene el Banco de España.
Por tanto, la institución apunta que el ritmo y el alcance de los ajustes serán los "principales determinantes de la fuerza y de la sostenibilidad de la recuperación".
MÁS TIEMPO
El regulador sostiene que el mantenimiento de políticas de ajuste y de impulso al crecimiento por el lado de la oferta y de las reformas estructurales, en una coyuntura de alto desempleo y escaso dinamismo de las rentas, resulta "muy costosa a corto plazo y entraña importantes riesgos de fatiga que pueden erosionar la capacidad de actuación".
Por ello, reclaman que el tipo de medidas necesarias para restablecer las bases del crecimiento "necesitan tiempo para que puedan materializar sus efectos y no se deben juzgar por el débil comportamiento de la economía en una coyuntura dominada todavía por los problemas acumulados en el pasado y las incertidumbres que rodean al proyecto europeo".
"La experiencia de episodios críticos anteriores enseña que la perseverancia en las medidas de ajuste, aunque fueran inicialmente costosas, logró contener los impulsos de desconfianza de los inversores y mercados y enderezar situaciones complejas y peligrosas", detalla el Banco de España.
En cualquier caso, el Banco de España dice que cabe esperar que la profundización en las áreas prioritarias de actuación de la política
económica "permita una recuperación gradual de la confianza interna y externa, y la normalización de la financiación de la economía, y establezca las bases para la reanudación del crecimiento económico de medio plazo".
DÉFICIT PÚBLICO
Respecto al déficit público, el Banco de España reconoce el esfuerzo realizado en el proceso sobre todo en la actual coyuntura de recesión económica.
El supervisor hace referencia en su informe a la Ley de Estabilidad Presupuestaria, que "fortalece" el marco de disciplina fiscal y recoge mecanismos de corrección automática de las desviaciones, procedimientos para la vigilancia continua de la evolución presupuestaria e instrumentos para hacer cumplir los objetivos.
En este sentido, recuerda que establece sanciones o, incluso, la intervención de la administración que no haya respetado esas metas.
Para el Banco de España "una aplicación rigurosa de la ley facilitará el cumplimiento de los objetivos presupuestarios".
Además, también relaciona el ajuste fiscal con la estabilización de la ratio de deuda pública sobre el PIB, y apunta que "el actual proceso de consolidación deberá tener una magnitud considerable, ya que se está desarrollando en un contexto macroeconómico particularmente adverso".
SECTOR EXTERIOR
En relación con el sector exterior, el Banco de España destaca el buen comportamiento de las exportaciones y que en 2013 se prevé que la economía registre una capacidad de financiación, a la que contribuirían tanto el ajuste de las importaciones de bienes y servicios, que siguen acusando la contracción de la demanda nacional, como el avance de las exportaciones.
Además, el retroceso de la demanda nacional se agudizó en 2012, según el regulador, una trayectoria que se ha prolongado en los meses iniciales de este año 2013, aunque "a un ritmo menor".
Además, es de esperar que se prolongue la debilidad del consumo de los hogares, en un contexto en que los principales factores determinantes "seguirán teniendo un comportamiento poco propicio para las decisiones de gasto".
En cuanto a los precios, la institución subraya que la previsible moderación de la inflación en 2013 descansa sobre la desaparición del impacto inflacionista transitorio vinculado al ajuste fiscal y la persistencia de un entorno macroeconómico propicio para la moderación de la inflación.
Asimismo, la caída prevista del gasto en consumo de los hogares debería también facilitar la moderación de los precios. No obstante, puntualiza que hay que tener presentes "algunos elementos de incertidumbre", como la magnitud de los efectos de las reformas de los mercados de factores y de productos, así como la posibilidad de un eventual recurso adicional a los incrementos de los precios administrados o de la imposición indirecta en el marco del proceso de consolidación presupuestaria.

Mostrar comentarios