Londres, 16 may.- El banco británico parcialmente nacionalizado Royal Bank of Scotland (RBS) anunció hoy la supresión de 1.400 empleos en el Reino Unido en los próximos dos años, dentro de su plan de reestructuración para sanear la empresa y devolverla al sector privado.
En un breve comunicado, la entidad con sede en Edimburgo (Escocia) precisó que los despidos no afectarán al personal de atención al público, sino a departamentos de logística y apoyo tecnológico.
El banco, rescatado durante la crisis crediticia de 2008 y propiedad del Estado en un 81 %, ha despedido ya a unas 30.000 personas en un proceso de recortes encabezado por el consejero delegado, Stephen Hester.
El sindicato Unite, que representa a los trabajadores afectados, criticó los "drásticos" despidos, después de que el banco anunciara hace unos días unos beneficios trimestrales netos de 393 millones de libras (465 millones de euros).
"No hay razón empresarial para recortar empleos de forma tan drástica", declaró el portavoz Dominic Hook, quien pidió que las bajas sean voluntarias y no obligatorias.
Más de un 40 % de los empleos se suprimirán en la sede escocesa, mientras que el resto se eliminarán en Londres y otros puntos de Inglaterra.
RBS argumenta en su nota que quiere centrar sus recursos en "las cosas que importan más a los clientes", como la redecoración de las oficinas y la inversión en servicios por internet y móvil.
El pasado febrero, el banco anunció unas pérdidas en 2012 de 5.971 millones de libras (6.866 millones de euros), debido a costes por venta indebida de productos financieros y manipulación del tipo interbancario Libor, pero aseguró también que iba en buen camino para poder ser privatizado.
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