El bce recuerda que la banca que participa en sareb no está exenta de contribuir al fgd

El Banco Central Europeo (BCE) considera que las entidades financieras españolas que participan en el capital de la Sociedad de Gestión de activos procedentes de la Reestructuración bancaria (Sareb), no están exentas de realizar aportaciones al Fondo de Garantía de Depósitos (FGD).
Así consta en el dictamen del Banco Central Europeo sobre el Fondo de Garantía de Depósitos remitido el pasado 20 de marzo por España a la institución que gobierna Mario Draghi.
"En cuanto a las entidades de crédito que hayan invertido directamente en la Sareb, el plan de negocio en que se apoya prevé beneficios razonables para los inversores, por lo que no es necesario eximir del pago de la aportación extraordinaria al FGD a entidades que han decidido invertir en la Sareb por razones de negocio", sostiene el BCE en su dictamen.
De este modo, el Gobierno de Mariano Rajoy aprobó que las entidades financieras españolas tendrán que realizar una “derrama extraordinaria” para dotar de recursos al FGD para comprar acciones de entidades nacionalizas no cotizadas que proceden del canje de las participaciones preferentes, es decir, de NCG y Caixa Catalunya.
La derrama será de un 3 por 1.000 de los depósitos. De esta manera, las entidades financieras tendrán que aportar entre 1.500 y 2.000 millones de euros extraordinarios al Fondo de Garantía de Depósitos.
Este pago se realizará en dos tramos. En concreto, en el primer ejercicio, que será en 2014 y se pagará en los primeros 20 días del año, se va a abonar el primer tramo que corresponde al 40% de esta derrama extraordinaria.
Además, el texto recogía que se tendrían en cuenta las aportaciones que ya han realizado las distintas entidades financieras al ‘banco malo’. Así, se establece una deducción de hasta un máximo del 30% de las cantidades invertidas por las entidades antes del 31 de diciembre de 2013 en la suscripción o adquisición de acciones o instrumentos de deuda subordinada emitidos por la Sareb.
Esta última medida afectaba directamente a BBVA, puesto que es la única principal entidad financiera que no está participando en el banco malo.