Lisboa, 5 jul.- El gobernador del Banco de Portugal, Carlos Costa, hizo hoy un llamamiento al consenso para superar la crisis de Gobierno que vive el país, no repetir errores del pasado y mantener bajo control el gasto público.
Costa afirmó que para recuperar la confianza de los mercados -que multiplicaron su presión sobre Portugal a raíz de la crisis política- es imprescindible cumplir "condiciones internas" que transmitan tranquilidad.
"Sería bueno lograr un consenso político amplio, también con los agentes sociales", agregó.
Durante su intervención en un encuentro con economistas en el que también participó el jefe de Estado, Aníbal Cavaco Silva, el responsable del banco emisor luso reclamó "sentido de la responsabilidad" en un momento crítico para Portugal.
El gobernador defendió un acuerdo que permita aprovechar el beneficio del regreso al crecimiento económico en los próximos años, pero "no para incrementar el gasto sino para reducir la carga fiscal".
Costa recordó que el país llegará a junio de 2014 -cuando deja de recibir la ayuda concedida por la UE y el Fondo Monetario Internacional (FMI)- con su deuda y déficit por encima de lo previsto inicialmente, así como con el desempleo en tasas récord.
Pese a que atribuyó el incumplimiento de esas metas a la negativa evolución de la macroeconomía a nivel europeo, sostuvo que los partidos políticos y agentes sociales lusos deben llegar a un acuerdo "para que el gasto nominal se mantenga constante".
Estos factores serán fundamentales para que el país logre regresar a los mercados y financiarse a tasas de interés sostenibles, agregó Costa en alusión al fin de los fondos del rescate financiero, que se acaban en 2014, otorgado hace dos años a Portugal por la UE y el FMI.
Las palabras del gobernador del banco central luso se producen en un contexto de inestabilidad política en el país, con los dos partidos conservadores del Gobierno de coalición en conversaciones para superar unas divergencias que amenazan su mayoría parlamentaria.
No obstante, el riesgo de ruptura entre ambas formaciones, que hace reclamar a la oposición la convocatoria de elecciones anticipadas, fue desechado ayer por el primer ministro luso, Pedro Passos Coelho, quien se mostró convencido de encontrar la "fórmula" que garantice la supervivencia de la alianza en el poder.
Este mensaje de tranquilidad, sumada al anuncio del Banco Central Europeo (BCE) de que los tipos de interés se mantendrán bajos, ha permitido que la presión de los mercados sobre Portugal baje hoy después de haberse recrudecido de forma notable el pasado miércoles.
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