El Gobierno griego pierde apoyos para aprobar las medidas de austeridad

Atenas, 6 nov.- La negativa del centroizquierdista Dimar, miembro de la coalición gobernante griega, a apoyar en el Parlamento las nuevas medidas de austeridad exigidas al país, ha dejado al Ejecutivo con una muy apretada mayoría para sacar adelante su propuesta.

El líder de esta formación, Fotis Kuvelis, aseguró anoche que estas medidas "no están relacionadas con el ajuste fiscal ni con las reformas estructurales" sino que tratan de "imponer un modelo ideológico neoliberal" en las relaciones laborales, por lo que su partido se abstendrá en la votación de mañana.

La coalición de Gobierno, en la que están también el conservador Nueva Democracia y el socialdemócrata Pasok, cuenta con 175 diputados, tras haber perdido cuatro parlamentarios contrarios a las medidas de austeridad desde el inicio de legislatura.

Sin los 16 escaños de Dimar, el Gobierno sólo cuenta con 159 diputados favorables, aunque los medios hablan de que 6 parlamentarios del Pasok han anunciado ya que tampoco apoyarán las medidas.

Según explicaron a Efe los servicios legales del Parlamento, el paquete de medidas tiene que ser aprobado por la mayoría absoluta de los diputados presentes en la cámara.

Así, si los 300 diputados toman parte en la votación, serán necesarios 151 síes, de lo que el Ejecutivo sólo tiene asegurados, de momento, 153.

Dimar sí ha anunciado que apoyará el próximo domingo la aprobación de los Presupuestos estatales para 2013.

Las medidas a las que se opone Dimar van desde el despido de 25.000 empleados públicos hasta 2013, hasta reducciones de las pensiones y eliminación de diversos complementos salariales.

También se incrementa en dos años la edad de jubilación (hasta los 67) y se reducen las prestaciones a los desempleados, así como la cobertura sanitaria.

Si las medidas son aprobadas, el descanso mínimo entre turnos exigido por ley se disminuirá de las 12 a las 11 horas.

Además, se exige reducir en un 90 % el número de profesores contratados en universidades y escuelas técnicas.

Diversos sectores, como el transporte, serán liberalizados y se permitirá a las grandes superficies comerciales la venta de diversos productos, hasta ahora sólo permitidos en pequeños comercios con licencias específicas, como el tabaco y la prensa.