El Gobierno luso no intervendrá en el debate por la venta de PT Portugal

Lisboa, 21 ene.- El Gobierno luso aseguró hoy que se mantendrá al margen de la decisión de los accionistas sobre la venta del negocio de Portugal Telecom (PT) en suelo luso a la luxemburguesa Altice.

Así lo dijo en el Parlamento la ministra de Finanzas lusa, Maria Luís Albuquerque, quien descartó de esta forma dar instrucciones a dos de los accionistas de PT en los que tiene voz el Estado portugués: la entidad financiera Novo Banco y el Fondo de Estabilización de Seguridad Social, que tienen una participación en la operadora del 12,6 y del 2,28 %, respectivamente.

Los accionistas de PT SGPS están convocados mañana a una asamblea general para analizar esta operación después de que la cita ya fuera aplazada hace dos semanas.

"El Gobierno ya dijo que no va a tomar una posición en este asunto", reiteró Albuquerque, quien precisó además que el Novo Banco es una empresa privada -pese a haber sido capitalizada con fondos públicos-, por lo que serán sus accionistas los que "definan el destino de PT".

PT SGPS, que cuenta en su balance con una participación del 25 % en Oi, tiene en sus manos si acepta o no la decisión de la empresa brasileña de vender el negocio de PT en suelo luso a la luxemburguesa Altice por 7.400 millones de euros.

El acuerdo de fusión alcanzado hace más de un año por PT y la brasileña Oi hizo efectiva la integración de la parte operativa de la firma lusa en esta última, mientras que una parte únicamente financiera -conocida como PT SGPS-, se mantiene todavía fuera del grupo.

Pese a que todavía la fusión no se encuentra concluida, Oi está interesada en la operación para poder contar con liquidez, aunque en la práctica ésta pone fin al objetivo inicial de crear un nuevo gigante de las telecomunicaciones a nivel mundial, como se pretendía inicialmente.

De hecho, diferentes personalidades lusas se muestran contrarias a la total pérdida de poder por parte de Portugal en PT, considerada una de las empresas "bandera" del país, e incluso algunos de ellos han hecho presión para conseguir invalidar el acuerdo de fusión con Oi.

Entre ellos, el que fuera presidente de PT hasta su dimisión en agosto de 2014, Henrique Granadeiro, quien antes defendía la fusión y ahora considera que la venta a Altice "desvirtúa el proyecto" y convierte la alianza con Oi en algo "inaceptable".

Incluso el Ejecutivo luso admitió que el acuerdo entre PT y Oi "quedó bastante lejos de las expectativas", según palabras del primer ministro, Pedro Passos Coelho.

No obstante, el titular de Economía, António Pires de Lima, admitió ayer en declaraciones recogidas por medios lusos estar "preocupado con los efectos de esta discusión" e instó a la firma a encontrar "accionistas estables para salir" cuanto antes de esta situación.