El Gobierno portugués aprueba una nueva estrategia dirigida al crecimiento

Lisboa, 23 abr.- El Gobierno portugués aprobó hoy una nueva estrategia de crecimiento y promoción industrial que ayude al país a superar la crisis a través del aumento de las exportaciones, ayudas fiscales y mejores condiciones de financiación para las empresas.

El Ejecutivo conservador presentó las líneas generales de un documento que debe todavía ser discutido con el resto de partidos y agentes sociales y con el que pretende adoptar medidas que favorezcan el crecimiento, tras dos años de aplicación de severas políticas de austeridad.

El Gobierno liderado por Pedro Passos Coelho quiere mejorar las tasas de aumento anual del Producto Interno Bruto (PIB) hasta el 2 % en 2020, un porcentaje que no alcanza desde hace más de una década.

Asimismo, pretende mejorar las exportaciones en 21 puntos porcentuales para que éstas pasen a representar el 50 % del PIB, también en 2020.

"Los dos primeros años de Gobierno estuvieron dedicados a las reformas estructurales", explicó hoy el titular de Economía y Empleo, Álvaro Santos Pereira, después de una reunión del Consejo de Ministros que se prolongó durante más de siete horas.

El establecimiento de incentivos destinados a las pequeñas y medianas empresas lusas y la creación de un banco de fomento fueron algunas de las medidas anunciadas por el responsable de Economía, quien precisó que se proporcionarán más detalles mañana.

En su intervención ante los periodistas, Santos Pereira abogó también por que el banco público del país, la Caixa Geral de Depósitos (CGD), disponga de una línea de créditos para las pymes por valor de 1.000 millones para este año y 2.500 millones para el siguiente a intereses asequibles.

Según el ministro, las pequeñas y medianas empresas, que representan cerca del 90 % del total de compañías portuguesas, tienen que hacer frente altas tasas de interés en el mercado del crédito, en comparación con lo que sucede en otros países.

Entre las medidas de fomento a la economía, está también una línea de 500 millones de euros para las firmas exportadoras.

"Hay empresas que tienen carteras sólidas de encargos, pero no han conseguido ni siquiera tener dinero para financiar la compra de materias primas", subrayó el ministro.

Una "reducción progresiva" del impuesto que pagan las compañías al Estado, así como la simplificación de los permisos de operación para las empresas y un aumento de los incentivos a la inversión extranjera son otros de los ejes revelados por Santos Pereira.

Asimismo, el Gobierno pretende dirigir parte de los fondos estructurales de la UE para el período 2014-2020 a apoyar la competitividad de las empresas portuguesas.

Santos Pereira aludió también al papel de las infraestructuras y las plataformas logísticas en el crecimiento económico y se refirió a la situación de los puertos portugueses, que cobrarán un 50 % menos por su uso como forma de atraer a más empresas.

Portugal atraviesa la peor crisis de su historia reciente y se encuentra bajo la asistencia financiera de la UE y el Fondo Monetario Internacional desde hace dos años, organismos que a cambio de su apoyo le exigen el cumplimiento de un severo programa de ajustes para reducir sus niveles de gasto público y de déficit.