España capta 1.000 millones en su segunda emisión de deuda sobre inflación

Madrid, 10 jul.- España ha adjudicado hoy 1.004,12 millones de euros mediante la emisión de bonos a diez años ligados a la inflación en la zona del euro a un interés marginal del 1,483 %, con lo que ha cubierto ya cerca del 72 % de sus necesidades de liquidez para el ejercicio.

Se trata de la segunda emisión de deuda ligada a la inflación, después de que el pasado mayo el Tesoro inaugurara las emisiones ligadas a la inflación y colocara 5.000 millones de euros con una rentabilidad del 1,835 %; ese día, la demanda alcanzó los 20.300 millones de euros, el mayor libro de órdenes en una operación sindicada de este tipo en Europa.

En ambos casos, el cupón fue del 1,8 %, nivel al que se encuentra la inflación en la zona del euro.

La Estrategia de Financiación del Tesoro prevé la celebración de subastas especiales, convocadas "ad hoc" y fuera del calendario habitual con el objetivo de mejorar la liquidez de un bono en concreto.

Por ello,sus objetivos de emisión suelen ser más bajos que en los de las subastas habituales.

Con la de hoy, el Tesoro ha captado 92.737 millones de euros dentro del programa de financiación regular a medio y largo plazo, un 71,7 % de la previsión de emisión del año, y a un coste medio del 1,87 % a 30 de junio, frente al 2,45 % de cierre de 2013.

Los analistas consultados por EFE coinciden en calificar la subasta de muy positiva, sobre todo por la elevada demanda de las entidades -3.714,12 millones de euros-, que ha situado la ratio de cobertura, que es la proporción entre la demanda de las entidades y el importe adjudicado, en 3,7 veces.

El estratega de Citi en España, José Luis Martínez Campuzano, ha explicado a EFE que se mantiene el elevado "apetito" de los inversores por España por lo que la adjudicación se ha cerrado "en línea con lo esperado".

En este sentido, y desde XTB, el analista Javier Urones destaca que el éxito que ha tenido este bono permite prever "futuras subastas de este tipo en lo que queda de año".

Urones resalta también la rebaja de tipos de interés que se ha visto desde la anterior emisión de estas características, en mayo, y aclara el interés que este tipo de emisiones suscitan entre los inversores.

Al estar ligada su rentabilidad al IPC, en un entorno de baja demanda interna en Europa esta fórmula permite al Tesoro no tener que pagar altos intereses al menos hasta que la economía se recupere de forma sólida y los precios acompañen la subida.

Los inversores que hoy han acudido a esta subasta, prosigue el analista, esperan en su mayor parte que a partir del próximo ejercicio los precios repunten en línea con la economía europea, y pasen en un futuro próximo a generar una rentabilidad mayor que la de sus homólogos de diez años no ligados a la inflación, que ofrecen hoy cerca del 2,8 % rentabilidad al año.

La semana que viene el Tesoro reanuda sus emisiones regulares de deuda, con una subasta de letras a seis y doce meses el martes, y otra de bonos el jueves, de las que aún se desconocen los importes.