Faconauto denuncia que los fabricantes les han convertido en su "banco malo"

Pamplona, 17 may.- El presidente de la Federación de Asociaciones de Concesionarios de la Automoción (Faconauto), Antonio Romero, ha afirmado que los fabricantes, con sus exigencias comerciales, les han convertido en su "banco malo" y esa situación, ha dicho, se traduce en cierres y despidos de trabajadores.

Romero, quien participa hoy en Pamplona en el "I Foro de la Automoción de Navarra", ha señalado que los fabricantes obligan a los concesionarios a asumir procesos que no les corresponden y a tener instalaciones "más grandes de lo razonable", hasta el punto de que España tiene los mayores concesionarios de Europa.

Además, ha indicado a los medios de comunicación, los concesionarios españoles tienen almacenados más coches que ningún otro país europeo y tienen que venderlos a un precio menor del que han pagado a los fabricantes.

Las multinacionales, ha insistido, "nos han convertido en su banco malo" y, de esta forma, "casi no han despedido gente", mientras que los vendedores han tenido que prescindir de más de 50.000 empleados, los mismos que trabajan en todas las fábricas de España.

Romero, quien ha subrayado que los concesionarios españoles gastan más en costes financieros que en sueldos, ha aseverado que esta situación se traduce en la unión de concesionarios, el cierre de puntos de venta y nuevos despidos.

Por este motivo, ha pedido al Gobierno español que "proteja a la pyme española frente a la multinacional" y, sobre todo, que cumpla los compromisos asumidos en la ley de distribución aprobada el año pasado, porque esta normativa "la han dejado en suspenso y estamos totalmente indefensos".

El presidente de Faconauto ha declarado que el sector está ahora en su peor momento, ya que "los mercados siguen cayendo, no se venden coches nuevos y no se ve una salida clara. El crédito hoy se ha hecho más caro y más complicado, y no responden los mercados".

No obstante, ha apuntado que "el mercado quiere crecer, la gente quiere comprar coches, pero no se atreve", y para dar salida a esa demanda "embalsada" se tienen que dar a su juicio dos circunstancias: que fluya el crédito y que haya confianza.

"En Estados Unidos se empezó a vender coches cuando empezó a fluir el crédito", ha asegurado Romero, quien ha destacado que los incentivos ya funcionaron en el pasado y ahora volverían a funcionar, porque hay mercado y hay una demanda estancada.

Por otro lado, ha puesto de relieve que en España hay un parque de coches "africanizado" y, de hecho, ha comentado, el de Andalucía es el más antiguo de Europa y, por ello, el más peligroso para la seguridad vial.

Además, ha considerado que, desde el punto de vista medioambiental, el coche eléctrico tampoco soluciona el problema de la contaminación, sino que hay que retirar los coches más antiguos de las carreteras.