La cachaza brasileña se venderá con denominación de origen en EE.UU.

Washington, 9 abr.- La cachaza, el aguardiente de caña de azúcar base para la "bebida nacional" brasileña, la caipiriña, será reconocido como un producto exclusivo de Brasil en las licorerías estadounidenses, informó hoy el Gobierno de Estados Unidos.

A cambio, Brasil designará los whisky Bourbon y Tennessee como productos distintivos de Estados Unidos en sus mercados, según acordaron el representante de Comercio Exterior de Estados Unidos, Ron Kirk, y el ministro brasileño de Desarrollo, Industria y Comercio Exterior, Fernando Pimentel, en Washington.

"La cachaza y los whisky Bourbon y Tennesse están entre los productos brasileños y estadounidenses más conocidos y únicos", señaló Kirk en una ceremonia celebrada en la capital estadounidense.

El representante estadounidense señaló que el acuerdo es un avance "muy positivo" para la industria de ambos países y refleja el compromiso de los dos Gobiernos de fortalecer los vínculos comerciales bilaterales.

El ministro brasileño, por su parte, aseguró que "es un resultado importante para los dos países después de una negociación que ha durado diez años".

El acuerdo permitirá comercializar en el mercado estadounidense el aguardiente brasileño con su nombre original, cachaza, en vez de como "ron brasileño", como aparecía hasta ahora por tratarse de una bebida derivada de la caña de azúcar.

El Gobierno brasileño espera que aumenten las ventas de este producto tradicional, ya que queda prohibido el uso de la denominación cachaza por empresas de otros países.

Las exportaciones de cachaza en 2011 a todo el mundo fueron de 17,3 millones de dólares, de los que 1,8 millones de dólares, poco más del 10 por ciento, se vendió en Estados Unidos, según datos del Gobierno de Brasil.

En 2011, Brasil fue el octavo socio comercial de EE.UU. con 74.000 millones de dólares en el comercio de mercancías, y el superávit del comercio de bienes de EE.UU. con Brasil fue de 12.000 millones en 2011.

El acuerdo se produjo en el marco del primer viaje oficial a Washington de la presidenta brasileña, Dilma Rousseff.