La confianza empresarial bajó en el último trimestre de 2010, hasta niveles de 2009

La confianza empresarial en España retrocedió en el cuarto trimestre de 2010, por segundo trimestre consecutivo, situándose en niveles de 2009. En concreto, este índice, elaborado por las Cámaras de Comercio, se redujo más de tres puntos con respecto al dato de octubre, situándose en -20,5.
El índice de situación del cuarto trimestre de 2010 mejoró ligeramente respecto al registrado en el trimestre previo (-20,8 frente a -21,5 en el tercer trimestre).
La causa del deterioro del ICE (Índice de Confianza Empresarial) hay que buscarla en el índice de expectativas para el primer trimestre de 2011. Este indicador experimenta un retroceso de casi siete puntos con respecto al dato anterior y se sitúa en -20,1, la peor cifra desde el segundo trimestre de 2009.
La contribución negativa a la evolución del indicador se puede distribuir casi por igual entre la cifra de negocio, el empleo y la inversión. Cada uno de los tres componentes registraron un retroceso cercano a un punto, que acumulado se corresponde con los 3,1 puntos que se reduce el indicador.
Debilidad de la demanda y dificultades de financiación siguen siendo los principales factores que limitan la actividad de las empresas, situándose ambos por encima de la media histórica.
El porcentaje de empresas que señala al resto de factores como limitadores de la marcha de sus negocios se mantiene por debajo de la media histórica, sobre todo en lo que se refiere al aumento de la competencia y a la escasez de personal cualificado.
La confianza empresarial de enero se ha resentido principalmente en el sector servicios, donde la caída fue generalizada. En el sector comercio y en hostelería y turismo el retroceso de la confianza de las empresas viene determinado principalmente por los resultados y expectativas de cifra de negocio, mientras entre las empresas que forman parte de la rama que agrupa al resto de servicios (telecomunicaciones, ocio, transporte,etcétera), la disminución de la confianza se debe en mayor medida a la situación y expectativas del empleo y de la inversión.
Por lo que respecta a industria y construcción, el índice se ha comportado de forma más favorable. Después del retroceso que experimentó el ICE de la industria en octubre, rompiendo la tendencia de mejora que ya se prolongaba seis trimestres, en la encuesta de enero la confianza del sector volvió a reforzarse, aunque muy débimente (0,4 puntos). La confianza en la construcción registró un avance algo más significativo, aunque también débil, de sólo 1 punto, hasta -35,7.
Según este estudio de las Cámaras, efectuado entre 6.263 establecimientos repartidos por todo el territorio nacional, sólo un 3,3% de los encuestados respondió que prevé aumentar su plantilla de trabajadores en los próximos meses. Casi el 80% cuenta con mantener el mismo número de trabajadores y el 17% prevé prescindir de alguno.
Además, sólo un 13,8% de los encuestados augura que su cifra de negocios crecerá en el primer trimestre de este ejercicio, frente a un 44,8% que cree que seguirá en los mismos niveles y un 41,4% que piensa que disminuirá.
El 70% seguirá invirtiendo lo mismo, mientras que el 5,8% invertirá más y el 24,2%, menos.