La crisis dobla en tres años el número de firmas de bolsa en números rojos

Apenas han sufrido bajas –el número de brokers se mantiene estable en torno al centenar-, sus niveles de solvencia son muy superiores a los de, por ejemplo, las cajas de ahorros, e incluso una tercera parte del sector mejoró sus resultados el año pasado. Una foto fija que sin embargo no encubre el profundo deterioro que la crisis también ha impuesto a las casas de bolsa.

La caída de los volúmenes de contratación en las bolsas y el descenso del beneficio generado por las operaciones para su propia cartera –es decir compras y ventas de acciones para la propia sociedad y no para clientes- redujo un 29,6% el resultado del sector el año pasado. Por su parte las comisiones netas, que son el mejor indicador del estado de salud de los intermediarios, cayeron un 21,2%.

Las cifras se corresponden con un duro comienzo de 2009 en los mercados, que hasta marzo del año pasado estaban cotizando las peores consecuencias de la crisis. La quiebra de Lehman Brothers había puesto en entredicho el propio sistema. A partir de marzo, las bolsas comenzaron a subir y permitieron un respiro al sector, que incluso lo había pasado mucho peor en el terrible 2008.

Las cifras traducen el profundo deterioro que ha sufrido el sector, a pesar de que una gestión tremendamente conservadora y eficaz auspiciada por la Comisión Nacional del Mercado de Valores (CNMV) y los beneficios acumulados en años de bonanza han impedido males mayores. Al cierre del año pasado había 24 brokers en pérdidas, de los que 15 ya lo estaban en 2008.

La comparación con 2006, el último año antes del comienzo de la crisis, demuestra que el número de casas de bolsa en pérdidas ha saltado desde las 10 hasta las 24. Entonces sólo había una sociedad de valores –las únicas autorizadas a realizar operaciones por cuenta propia- y nueve agencias en números rojos. Ahora hay 10 y 14, respectivamente.

Deterioro de los ratios de solvencia

Los ratios de solvencia del sector siguen siendo razonables, aunque muestran un descenso muy sgnificativo, tanto por las circunstancias de mercado como por la nueva normativa que el año pasado exigió al sector más recursos propios para cubrir el riesgo de su operativa diaria. El año pasado seis brokers –cinco agencias y una sociedad- terminaron con déficit de recursos propios.

Antes de la crisis, el sector vivía en la abundancia. Al cierre de 2006, el 95% delas firmas tenía un excedente sobre los recursos propios exigibles superior al 25%. Para el 69% de las entidades, ese porcentaje era superior al 100%.

Ahora, las cifras han cambiado. En 2009, el superávit de recursos propios es de 3,7 veces para las sociedades de valores de 1,5 para las agencias, frente a las 4,6 y 2,1 veces, respectivamente, del año anterior. En el primer trimestre de 2010, marcado por la volatilidad en las bolsas –la española sufrió un duro ataque en febrero, preludio del que en mayo ha obligado al Gobierno a presentar un traumático plan de ajuste del déficit- las casas de bolsa siguen tocadas.  El beneficio neto del centenar de firmas ha sido de 69,9 millones, un 19,58% menos, en un pmer tirmestre en el que una firma, Sebroker, se ha declarado en concurso de acreedores.