Yakarta.- La primera estatua del mundo en honor a Barack Obama acabó hoy, tan sólo dos meses después de su flamante inauguración en un parque de Yakarta, tirada en una humilde aula de colegio, a resguardo de la avalancha de críticas que ha provocado.
El monumento yace sobre la mesa del profesor del laboratorio de inglés de la escuela de enseñanza primaria "Besuki Menteng", a la espera de que la dirección del centro decida un nuevo emplazamiento dentro de sus instalaciones.
La imagen, que representa al presidente de Estados Unidos con diez años, pantalones cortos, deportivas y una mariposa en la mano, presenta un aspecto desangelado: tumbada sobre una sábana blanca, con el anclaje al pedestal al aire, entre la pizarra y una vieja vitrina con trofeos escolares.
"La hemos dejado ahí, en la clase de inglés del segundo piso, de forma temporal, mientras deciden dónde ponerla. Aunque supongo que irá en el patio delantero", aseguró a EFE el vigilante del centro, que prefirió no identificarse.
El traslado del monumento del parque a la escuela pública, que fue anunciado para esta semana sin especificar una fecha concreta, se realizó la pasada madrugada.
El colegio, en el que Obama estudió dos de los cuatro años que pasó en Yakarta, se ofreció a acoger la estatua a petición del Gobierno local, después de que arreciasen las protestas en su contra en los medios de comunicación y en Facebook.
Esta red social, la más popular de internet, ha sido el escenario en que la noticia del traslado ha corrido como la pólvora desde primera hora de la mañana y donde se multiplican las felicitaciones y las consignas de victoria entre los críticos.
Desde su inauguración, la imagen había generado una fuerte controversia y suscitó la creación de un grupo de detractores en Facebook, que ha congregado a cerca de 58.000 personas.
"Barack Obama vivió en su infancia en Yakarta. Ha hecho historia al convertirse en presidente de Estados Unidos, pero no es nadie en la historia de la nación soberana de Indonesia", reza el manifiesto escrito por el creador del grupo, Heru Nugroho.
"Por el orgullo de una nación soberana", concluye tajante la declaración, el monumento a Barack Obama "debe ser desmantelado".
Mientras tanto, en el parque de Menteng, tan sólo un muñón de hormigón recuerda el lugar donde la estatua del presidente estadounidense permaneció durante dos meses.
El Gobierno de Yakarta tiene previsto congraciarse de nuevo con el pueblo levantando en ese mismo emplazamiento una obra artística que represente "la identidad indonesia".
El traslado se ha realizado tan sólo cinco semanas antes de la primera visita oficial del presidente estadounidense a Indonesia, que tendrá lugar entre el 20 y el 22 de marzo.
Durante la visita de Obama y su familia, que según el Gobierno indonesio tendrá "un aspecto sentimental", el mandatario estadounidense presentará la "alianza estratégica integral" entre Estados Unidos e Indonesia.
Durante los cuatro años que residió en Yakarta, Obama estuvo matriculado en un colegio católico y en la escuela pública de Meteng, hasta que dejó Yakarta cumplidos los diez, para volver a Hawai (Estados Unidos) con sus abuelos maternos y nunca regresar a Indonesia.
El hecho de que Obama residiese en Indonesia parte de su infancia desató en el país asiático un extraordinario furor por el candidato demócrata durante las últimas elecciones presidenciales estadounidenses.
Juan Palop
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