Girona, 15 mar.- La Plataforma de Afectados por la Hipoteca (PAH) ha fracasado hoy en su intento de paralizar una subasta de adjudicación de una vivienda de Salt (Girona) en la que vive una familia gambiana, pese a apelar a la reciente sentencia del Tribunal de Justicia de la UE en contra de la ley española de desahucios.
El abogado de oficio de Mohamed Tanja, el padre de la familia afectada, no se ha presentado en el Juzgado de Girona que lleva el asunto para intentar paralizar la subasta al considerar que era tarde para frenar el proceso, según ha indicado el propio Tanja.
La portavoz de la PAH en Girona, Marta Afuera, ha alegado por este motivo indefensión de Tanja en este procedimiento y ha apelado a la sentencia europea, que considera que las medidas que regulan en España los procesos de desahucio por impago de hipotecas son contrarios a la legislación europea de protección de consumidores.
El decano de los jueces de Girona, Hugo Novales, ha explicado hoy que, para interrumpir un proceso ejecutivo hipotecario, es necesario que el propietario alegue a través de su abogado cláusulas abusivas, algo que no ha sucedido en este caso.
Novales ha puntualizado, de todos modos, que los jueces carecían hasta ahora de "campo de maniobra" para actuar ante una situación de este tipo y que, la sentencia europea, obligará ahora a cambiar la ley, aunque ha destacado que todo este nuevo panorama deberá ser estudiado en los próximos días.
La veintena de integrantes de la PAH que ha acudido a los juzgados de Girona para intentar detener la subasta han sido desalojados por los Mossos d'Esquadra, con la excepción de su portavoz y otra persona, que han permanecido junto a Mohamed Tanja mientras la entidad bancaria que concedió la hipoteca se ha adjudicado la vivienda.
Marta Afuera ha considerado que si Mohamed Tanja hubiese contado hoy con un abogado hubiese podido frenar la subasta de hoy mientras el juez decano ha señalado que, en todo caso, el magistrado que lleva el caso no podía actuar de oficio.
Mohamed Tanja ha explicado a la prensa que compró el piso hace diez años y que no paga la hipoteca desde hace año y medio.
El gambiano ha relatado también que trabajó en la construcción y en el aeropuerto de Girona, pero que está en paro en la actualidad y que su mujer sufre una discapacidad del 52 por ciento. Ambos tienen dos hijos de tres y cinco años. EFE
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