La vicepresidenta asegura que “es necesario intensificar las reformas”

La vicepresidenta del Gobierno, Soraya Sáenz de Santamaría, afirmó este martes que es “necesario intensificar el ritmo de reformas”.
En la clausura de la Asamblea General de la Confederación Española de la Pequeña y Mediana Empresa (Cepyme), la vicepresidenta aseguró que “España avanza por el camino correcto” pero advirtió de la importancia de mantener el ritmo reformista.
En este sentido, puso como ejemplo el programa “contundente” de lucha contra la morosidad aprobado el pasado viernes por el Consejo de Ministros.
También destacó que la competitividad de la economía española “está mejorado” y valoró el descenso del desempleo registrado en junio.
En la Asamblea General de la patronal de las pymes, Sáenz de Santamaría destacó que las pequeñas y medianas empresas “constituyen una de las mayores prioridades del Gobierno" y recordó que emplean a tres cuartas partes de los trabajadores en España.
Así, aseguró que “este Gobierno es plenamente consciente” de este hecho y añadió que “está comprometido con las pymes".
La vicepresidenta hizo hincapié también en la reducción del déficit y admitió que “todos hemos hecho un gran esfuerzo y un ajuste muy importante”.
En este sentido, destacó el nuevo calendario de reducción de déficit aprobado por Bruselas y sostuvo que era necesaria “una senda de déficit más acorde con los tiempos”.
Asimismo, valoró la reforma del sector financiero y apuntó que “el Gobierno es consciente de que el acceso a la financiación es clave”. Por esta razón, explicó que el Ejecutivo está buscando alternativas a las vías tradicionales de acceso al crédito.
“EXTREMA DEBILIDAD”
En este mismo acto, el presidente de Cepyme, Jesús Terciado, advirtió de que “el tejido pyme se ha deteriorado muy significativamente” durante la crisis y añadió que “nuestros pequeños y medianos negocios se encuentran en una situación de extrema debilidad".
Así, señaló que han desaparecido “casi el 32% de las pequeñas empresas y cerca del 25% de las medianas”.
El presidente de Cepyme criticó que, pese a la situación “tan delicada” que atraviesan, las pymes, las pequeñas y medianas empresas están padeciendo un “auténtico asedio fiscal", similar al que afrontan “las familias españolas". En este sentido, defendió que “ya no hay liquidez en nuestra caja para más impuestos".
En cuanto a la morosidad, aseveró que “es un problema realmente grave" y agregó que “si persiste y no se soluciona, el Gobierno debería avanzar en la implantación de herramientas eficaces que obliguen a cumplir la normativa vigente".
Sobre la situación del acceso al crédito, Terciado sostuvo que sigue en un "círculo tormentoso” del que es necesario salir, ya que el 95% de las pymes dependen de los bancos.
En su opinión, los 265.000 millones de euros menos que la banca ha concedido en créditos "han paralizado la práctica totalidad de los proyectos", por lo que reclama que "la búsqueda de alternativas es urgente".
Por último, apuntó que la patronal “respalda” el objetivo de reducción del déficit público y el “adelgazamiento” de la administración pública, que si se hubiera realizado con anterioridad "nos hubiera evitado esta sobrecarga fiscal en plena recesión económica".