China es un motor clave del crecimiento mundial. La desaceleración del crecimiento chino ha generado temor en las plazas financieras internacionales y perjudica a las finanzas de los países productores de materias primas, para los que el gigante asiático es un cliente esencial.
Como ocurre desde julio, las exportaciones retrocedieron también un 3,6% en octubre, a 1,23 billones de yuanes, en una contexto de debilidad de la demanda internacional, anunciaron las aduanas chinas.
Esta caída es superior al 3,2% pronosticado por los analistas consultados por la agencia Bloomberg News.
El balance comercial se apreció, por su parte, un 40,2%, a 393.220 millones de yuanes, impulsado por la bajada continua de las importaciones. Este hecho deja entrever que China tiene dificultades para impulsar la demanda interior.
dly/psr/ev/myl/tjc
Hemos bloqueado los comentarios de este contenido. Sólo se mostrarán los mensajes moderados hasta ahora, pero no se podrán redactar nuevos comentarios.
Consulta los casos en los que lainformacion.com restringirá la posibilidad de dejar comentarios