Los beneficios del grupo Pao de Açucar se reducen un 3 % en primer semestre

Sao Paulo, 26 jul.- Los beneficios consolidados del grupo Pao de Açúcar, líder de la distribución minorista en Brasil, alcanzaron los 223,4 millones de reales en el primer semestre del año (unos 146 millones de dólares), un 3 % menos que en el mismo periodo de 2010, informó hoy la compañía.

El resultado bruto de explotación (Ebitda) se situó en los 1.224 millones de reales (unos 800 millones de dólares) entre enero y junio de este año, dato que implica un aumento del 50,8 % más comparado con los mismos meses del año pasado.

En el segundo trimestre del año, la compañía ganó 91 millones de reales (unos 59 millones de dólares), un 64 % más que los 55,5 millones de reales del mismo periodo del año pasado.

El resultado bruto de explotación (Ebitda) se situó en los 641,2 millones de reales (unos 419 millones de dólares) en ese periodo, dato que supone un crecimiento del 66,3 % frente a los 385,5 millones de reales del mismo trimestre de 2010.

Los ingresos netos de la compañía alcanzaron los 11.269,8 millones de reales (unos 7.365 millones de dólares) entre abril y junio, un 61,5 % más.

Los resultados consolidados incluyen además de la división alimenticia las firmas Casas Bahia y Ponto Frio.

El grupo anunció sus resultados dos semanas después de que fuera cancelada temporalmente la propuesta de fusión de las operaciones del grupo Pao de Açucar con la filial brasileña del gigante francés de la distribución Carrefour.

La iniciativa fue suspendida después de que los administradores del grupo francés Casino, socio de Pao de Açúcar y rival de Carrefour, se pronunciaran en contra el proyecto de fusión.

El plan de fusión, revelado el pasado 28 de junio, planteaba la unión de los dos mayores grupos de distribución brasileños, Pao de Açúcar, controlado por Casino y la familia brasileña Diniz, y Carrefour Brasil, para crear un gigante valorado en unos 30.000 millones de euros (unos 41.899 millones de dólares) y una cuota de mercado del 27 %.

Casino comparte el control de Pão de Açúcar con la familia Diniz por medio del holding Wilkes, que de acuerdo con los pactos estipulados entre ambas partes debía permitir a la primera compañía asumir el control del grupo en 2012.