Los buenos jefes son pocos: sólo un 10% de la población tiene talento para dirigir

Los buenos jefes son un bien escaso. Y, además, las empresas eligen mal a la hora de designar puestos de dirección. Es la realidad sobre el mundo laboral que señala en su último informe la agencia Gallup: menos de un 10% de la población tiene las características innatas para ocupar un puesto de dirección, asegura, en una radiografía sobre los jefes en EEUU.

Porque, según el informe de Gallup, además de la experiencia, es necesario un 'talento innato' para ser jefe: y sólo un 10% de la población tiene las características ideales para ocupar puestos de dirección y conseguir sacar lo máximo de si mismos y de sus empleados. No obstante, apunta que hay más gente con características que les permiten funcionar en estos puestos, 2 de cada 10 que quizá no sean perfectos, pero tienen competencias suficientes.

Aunque pueda parecer una cifra baja, Gallup tranquiliza, y explica que, de media hay sólo un jefe por cada diez personas, por lo que es una proporción adecuada. Si se elige bien, claro. Según apunta, este es el principal problema ya que es complicado para las compañías encontrar a estos seres ideales, yse equivocan en el 82% de las contrataciones de este tipo. Algo que, apunta Gallup, podría estar costándole millones de dólares al año y que explica: en la encuesta que realizaron entre jefes en EEUU, la mayoría citaba haber hecho un buen trabajo en otros puestos que no implicaban dirigir, por lo que no han demostrado tener las aptitudes para ser jefe. Es decir, que llegaban a jefes al ser ascendidos, pero no por haber demostrado capacidad de organización.

Pero ¿qué es ser buen jefe? Después de proporcionar los datos sobre la 'escasez' de jefes, Gallup señala las características que hacen a estas personas ideales para dirigir. Son 5:Toman decisiones basadas en productividad, no en política.Crean relaciones de confianza, diálogo abierto y transparencia.Toienen asertividad para producir resultados y habilidad para superar la adversidad.Motivan a todos sus empleados a tomar la iniciativa y les transmiten su misión y visiónCrean una cultura de responsabilidad.

Características que podrían parecer lógicas, pero como apuntan desde Gallup, no se pueden aprender: o naces con ellas, o no las vas a conseguir nunca. Si tienes la suerte de tener estas capacidades, apunta el estudio, las ventajas son múltiples, y señala a todos los aspectos económicos en los que mejora la empresa: un 10% más de productividad, un 20% más de ventas, un 30% más de beneficios, y un 25% menos de bajas sin justificar. Los buenos jefes, además, están más implicados en su trabajo y son 'embajadores' de la marca para la que trabajan.