Madrid celebra por 5ª vez el examen de portero de local de ocio

Madrid, 5 may.- La Comunidad de Madrid celebra hoy la quinta convocatoria del examen de controlador de acceso a locales de ocio nocturno, al que se han presentando 787 personas, la tercera parte de las que acudieron a las primeras convocatorias hace tres años.

Desde que se reguló esta actividad -a raíz de la muerte en 2008 del joven de 18 años Álvaro Ussía en la puerta del "Balcón de Rosales", que murió tras recibir los golpes de tres porteros de esa discoteca madrileña-, 4.155 personas han conseguido la certificación.

El viceconsejero de Presidencia e Interior de Madrid, Luis Armada, ha destacado que, de esos 4.155 controladores acreditados, 124 son mujeres, y que dicho certificado es obligatorio en la Comunidad para poder desarrollar la actividad, a fin de "contribuir a la seguridad de todos los ciudadanos tanto dentro como fuera de los locales de ocio".

A esta quinta convocatoria se han presentado 767 personas de las cuales el 62,5% (492) son españoles y el 37,4% restante (295) de procedencia extranjera.

Las nacionalidades más representadas son Bulgaria (38), Marruecos (24) y Rumanía (98). Además, del total de aspirantes (787), 10 son mujeres.

Según la Consejería, se ha mantenido la misma estructura de examen desde 2009, fecha de la primera prueba, es decir, que los aspirantes tienen que superar dos exámenes: uno de conocimiento, con 50 preguntas, y otro psicológico.

En la primera prueba se abordan cuestiones sobre derechos y deberes fundamentales de la Constitución Española, nociones básicas de delitos contra las personas y contra la libertad y seguridad, la omisión del deber de socorro, atentado o falta de respeto a la autoridad o sus agentes así como delitos contra la salud pública.

Además, los aspirantes deben conocer cuestiones sobre la tenencia de armas, sobre el derecho de admisión y libro de reclamaciones, horarios de establecimientos públicos, limitaciones a la oferta de bebidas alcohólicas y tabaco, protección de menores y nociones básicas sobre salvamento, prevención y extinción de incendios.

La segunda parte del examen consiste en un test psicotécnico con el que se evalúan factores de la personalidad, como la hostilidad, la agresividad o desajuste emocional.

Al igual que en las ocasiones anteriores, los aspirantes deberán presentar el certificado de registro de penados y rebeldes del Ministerio de Justicia y una declaración jurada o promesa de carecer de antecedentes penales en el extranjero.