Madrid. La comunidad unifica la normativa de tarjetas de estacionamiento para personas con movilidad reducida


El Consejo Asesor de Personas con Discapacidad de la Comunidad de Madrid dio hoy el visto bueno a la nueva normativa que unifica los criterios para el uso de las tarjetas de estacionamiento para personas con movilidad reducida en la región, según informó el portavoz del Gobierno regional, Salvador Victoria.
La normativa, elaborada por la Consejería de Asuntos Sociales, es, según Victoria, “un paso muy importante y supone que estas personas puedan usar la misma tarjeta en todos las localidades de la región”.
Asimismo, indico, ya “no habrá disparidad de criterios a la hora de fijar las condiciones para otorgar estas tarjetas de aparcamiento” y serán las mismas en todos los municipios madrileños.
Destacó que, tras entrar en vigor esta normativa, “nadie podrá ser multado por aparcar en un lugar reservado de una localidad distinta a la que vive la persona con movilidad reducida”.
La actual normativa provocaba situaciones como que personas con movilidad reducida fuesen multadas injustamente o que las grúas retirasen sus vehículos.
Según el texto aprobado, al que tuvo acceso Servimedia, “puesto que la regulación del uso de las tarjetas de estacionamiento para personas con movilidad reducida es municipal, ahora deberán ser los ayuntamientos los que adapten sus tarjetas y ordenanzas a esta nueva normativa”. Tendrán de plazo para ello hasta el 24 de diciembre.
Los ayuntamientos deberán ahora reflejar en sus respectivas ordenanzas las zonas del núcleo urbano que tienen la condición de centro de actividad y establecer las condiciones para la reserva de este tipo de plazas en los lugares próximos al trabajo o domicilio de las personas con movilidad reducida.
Los núcleos urbanos deberán disponer de un mínimo de una plaza de aparcamiento reservada y diseñada para su uso por personas titulares de la tarjeta de estacionamiento por cada 40 plazas o fracción, independientemente de las plazas destinadas a residencia o lugares de trabajo.
Además, deberán reservar plazas de estacionamiento en servicios y establecimientos sanitarios y, en el caso de que no apliquen la exención de tarifas en las zonas de estacionamiento limitado para los titulares de tarjeta de estacionamiento para personas con movilidad reducida, deberán garantizar que se cumpla la cuota mínima de plazas de aparcamiento reservadas para personas con discapacidad.
Los ayuntamientos también podrán conceder ahora tarjetas de estacionamiento a personas con movilidad reducida aunque esta situación no haya sido dictaminada oficialmente. Entre los motivos que pueden tenerse en cuenta en esta situación está la de padecer una enfermedad que suponga una reducción sustancial de la esperanza de vida y que no permita tramitar en tiempo la solicitud ordinaria de la tarjeta.

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