En un auto al que ha tenido acceso Europa Press, el Juzgado de Instrucción 1 de Gandesa (Tarragona) ha dado la razón a los ecologistas en que debe ser en juicio donde se contrasten las periciales de los demandantes y de la otra parte, la Asociación Nuclear Ascó Vandellós (Anav), ya que llegaron a conclusiones contrarias.
"Dado que nos hallamos en presencia de periciales que alcanzan conclusiones distintas, deberá ser en el acto de juicio oral donde se practique la prueba en toda su extensión a fin de determinar qué efectos sobre las personas, bienes y medioambiente se produjeron por la emisión", razona el tribunal.
Sin embargo, el juzgado ha confirmado el sobreseimiento de la causa contra dos inspectores que habían sido investigados, después de haberlo pedido tanto la Fiscalía como la Anav ante lo que la acusación no presentó recurso.
En noviembre de 2015, el juzgado de Gandesa había archivado la causa a petición de la Asociación Nuclear Ascó Vandellós (Anav) por esta fuga que tuvo su origen en los trabajos de recarga de Ascó I en noviembre de 2007, en los que se ensució el sistema de ventilación del edificio de combustible.
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