México, 16 oct.- El primer ministro de Portugal, Pedro Passos Coelho, afirmó hoy en México que los procesos de reforma emprendidos en su país y en México serán duraderos "siempre que sepan reunir el más amplio consenso posible en nuestras sociedades".
En un discurso previo a un almuerzo que le ofreció en su honor el presidente de México, Enrique Peña Nieto, el mandatario luso celebró la "gran ambición" que México y Portugal mantienen ante los planes de reformas emprendidos en ambos países.
Passos Coelho reconoció ambos gobiernos "se encuentran en circunstancias diferentes" de índole política y económica pero sostuvo que las reformas "son duraderas siempre que sepan reunir el más amplio consenso posible en nuestras sociedades".
El mandatario luso felicitó al presidente de México, Enrique Peña Nieto, por el empeño puesto en las que impulsa, con las que pretende transformar a su país y por haber logrado "tener una convergencia multipartidaria" en el proceso para promoverlas.
Así se refería al Pacto por México, el acuerdo del Gobierno y los tres mayores partidos políticos del país, para acometer las reformas estructurales en temas de gran calado, como el educativo, financiero, fiscal y en el sector de telecomunicaciones.
Una más, la energética, que aún se discute, se formuló fuera del Pacto por México debido a las divergencias de los tres principales grupos políticos de México en la materia.
"Sabemos por experiencia propia lo difícil que es renovar y mantener esas condiciones de consenso más ensanchado", indicó Passos, para quien lo más importante aun con diferentes puntos de vista, es lograr que prosperen las reformas.
Sobre las emprendidas por el Gobierno que encabeza en Portugal dijo que habían sido "muy importantes", que en cierto modo fueron "precipitadas por los acontecimientos" derivados de la crisis económica y financiera que afecta a su país pero que iban más allá de esa coyuntura.
Recordó que "Portugal estuvo en la vanguardia de problemas más serios y profundos que afectan hoy a muchas de las llamadas economías occidentales y, seguramente, de las economías europeas", agregó.
El primer ministro portugués recordó que en un mundo tan globalizado e interdependiente como el actual es importante que unos países no se cierren a los otros, ni los más industrializados entre ellos, ni los primeros con los otros con menos desarrollados.
"Son hoy muchas veces países que no tienen el mismo nivel de desarrollo (los emergentes) los que son llamados a contribuir de una forma global para la estabilidad financiera y económica de los países más desarrollados", añadió el primer ministro.
Además, Passos se dijo partidario de actualizar el Acuerdo de Asociación Económica, Concertación Política y Cooperación, firmado en 1997 y en vigor desde 2000.
Recordó que ese el modo en que ha operado la UE, en la que los más pudientes "se solidarizan con su apoyo con los que no son tan ricos" porque, a la postre, "todos tenemos qué ganar cuando nos apoyamos y explotamos las oportunidades que se abren a nuestras economías".
El discurso de Passos Coelho concluyó con un brindis con los asistentes al almuerzo, al que seguirán su participación en un seminario de empresarios esta tarde, y por una gira de trabajo que mañana realizará por el Estado de México, vecino a la capital mexicana.
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