Pemán asegura que si la CAI forma un SIP será de tamaño moderado

  • Zaragoza.- El nuevo presidente de Caja Inmaculada, Juan María Pemán, ha reiterado hoy que la primera opción para la entidad es seguir en solitario y ha asegurado que si formara un Sistema Institucional de Protección (SIP) o "fusión "fría" sería de tamaño moderado para no quedar "fagocitada", con entidades iguales o más pequeñas.

Pemán asegura que si la CAI forma un SIP será de tamaño moderado
Pemán asegura que si la CAI forma un SIP será de tamaño moderado

Zaragoza.- El nuevo presidente de Caja Inmaculada, Juan María Pemán, ha reiterado hoy que la primera opción para la entidad es seguir en solitario y ha asegurado que si formara un Sistema Institucional de Protección (SIP) o "fusión "fría" sería de tamaño moderado para no quedar "fagocitada", con entidades iguales o más pequeñas.

Así lo ha afirmado en su primera rueda de prensa tras su nombramiento, el pasado 30 de mayo, acompañado por el director general de la entidad, Luis Miguel Carrasco, y el director general adjunto, Juan Antonio García Toledo.

Pemán, tras subrayar que asume la presidencia de la CAI como uno de los retos más estimulantes y consciente del compromiso que comporta, ha precisado que la caja no ha desechado la posibilidad de seguir en solitario, porque hay datos "objetivos y contundentes que apoyan" su viabilidad, especialmente la solvencia, liquidez, eficiencia y rentabilidad en la cartera de inversión crediticia, pero también porque no le obsesiona "la carrera por el tamaño".

Sin embargo, ha agregado, la entidad está abierta a diversas posibilidades de integración con otras cajas, en ningún caso como fusión estricta sino como SIP, y en esa vía la CAI trabaja "intensamente" a medida que se aceleran los movimientos para la reestructuración del sistema financiero.

Ha recalcado que no descarta "en absoluto" que el escenario económico actual y las recomendaciones del Banco de España "acaben imponiendo la opción de integración" como la más conveniente para la caja, aunque siempre sería bajo las premisas del mantenimiento de las señas básicas de la identidad, de tener una posición relevante en el SIP, en el que en su caso se integrara, y de conservar al máximo el empleo.

Ha matizado que CAI se plantearía un SIP que añada valor a sus componentes, por el reforzamiento de los proyectos respectivos, y sobre la base de una afinidad en los aspectos sustanciales del perfil de negocio y cultura de gestión.

La CAI, ha reiterado, no se plantea participar en un SIP "muy grande", en el que la entidad quedaría "fagocitada", sino en uno de tamaño moderado, con entidades iguales o más pequeñas en el que pudiera seguir siendo ella misma y, si es posible, con una cierta proximidad geográfica, con entidades de comunidades limítrofes a Aragón, aunque sin descartar otras posibilidades.

Tras confirmar que mantiene "muchos contactos" con otras cajas aunque no se ha iniciado ninguna negociación, ha hecho hincapié en que es cierto que el Banco de España "está apretando" porque el próximo 30 de junio finaliza el plazo de solicitud de las ayudas al Fondo de Reestructuración Ordenada Bancaria (FROB), al que la CAI no se plantea recurrir y por tanto no le "agobia".

Aunque Pemán no se ha atrevido a fijar una fecha para que la CAI decida si forma o no un SIP, sí ha apuntado que en los próximos meses tendrá que aclarar si sigue definitivamente en solitario o no, una determinación, ha agregado, en la que se tendrá en cuenta la opinión de los trabajadores y en la que el Gobierno de Aragón está dando "libertad", con pleno respeto a la autonomía de las cajas.

En ese sentido, Carrasco ha asegurado que a día de hoy no se ha negociado ni avanzado en un borrador ni protocolo de acuerdo, aunque "los teléfonos suenan todos los días".

Pemán ha reiterado que la caja sigue siendo rentable, como demuestran los resultados de los cuatro primeros meses del año, que son "positivos y alentadores", con un beneficio neto de 7 millones de euros y un alto nivel de solvencia, con un "core capital" del 8,5 por ciento y una liquidez "sobresaliente", del 12% del activo frente al 3% del conjunto de entidades de crédito, y un ratio de dudosos, que aunque ha crecido, sigue por debajo de la media de las cajas.

Ha destacado además que la CAI va a mantener las líneas de actuación marcadas desde enero e impulsadas por Carrasco como director general de la entidad, plasmadas en el plan estratégico 2010-2013 con líneas de actuación que persiguen objetivos de crecimiento del volumen de activos, en inversión crediticia y en depósitos, de rentabilidad, solvencia, liquidez y eficiencia.

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