Sacerdotes peruanos dan inicio a diálogo para solucionar conflicto minero

Lima, 9 jul.- El arzobispo de Trujillo, Miguel Cabrejos, y el sacerdote Gastón Garatea encabezaron hoy un diálogo con las autoridades de la región peruana de Cajamarca y con dirigentes que se oponen al proyecto minero Conga, para solucionar el conflicto que la semana pasada dejó cinco muertos por disturbios con la Policía.

"Creo que ha sido muy buena la reunión. Hemos escuchado, nos han hablado y ésta es una primera reunión, tiene que haber otras. No tiene que romperse el dialogo porque creo que es importante", afirmó Cabrejos.

El arzobispo señaló que, como resultado de la cita, lleva consigo varias propuestas que presentará al Ejecutivo y dijo que la comisión regresará a la ciudad de Cajamarca, probablemente la próxima semana.

"Tenemos que devolver la confianza. Porque si se pierde la confianza se pierde todo", recalcó Cabrejos.

La reunión que duró más dos horas se realizó en la iglesia evangélica presbiteriana, cercana a la plaza de Armas de Cajamarca, donde decenas de pobladores protestaban en los exteriores del local en rechazo al proyecto de oro y cobre.

Por su parte, Garatea indicó que éste "era el comienzo de un largo camino y ojalá que no se desanimen" en la búsqueda de una solución pacífica al conflicto.

"La gente se siente muy afectada. El Estado tiene que conversar. No importa que (los pobladores) digan que Conga no va, sino que quieran conversar", expresó Garatea.

El presidente regional de Cajamarca y uno de los principales opositores al proyecto minero, Gregorio Santos, dijo que con esta reunión se pudo escuchar las opiniones de "los ronderos (campesinos), los quechua hablantes, alcaldes y delegados", por lo que la consideró un éxito.

Uno de los dirigentes de la provincia de Celendín, Milton Sánchez, también presente en la rueda de prensa, señaló que la reunión ha servido para ser escuchados: "cosa que pedíamos a Ollanta Humala y hasta el momento no se produce".

En tanto, Eddy Benavides, dirigente del distrito de Bambamarca, manifestó que "Conga es inviable", que su pueblo es pacífico y que rechaza todo tipo de violencia.

En ambas localidades hubo enfrentamientos entre los manifestantes y la policía durante la semana pasada, antes de que el Gobierno declarara el estado de emergencia en Cajamarca.

Antes de la reunión, los sacerdotes visitaron en dos hospitales a los heridos, entre pobladores y policías, producto de los violentos enfrentamientos.

El presidente Ollanta Humala y el ministro de Justicia, Juan Jiménez, convocaron a Cabrejos, expresidente de la Conferencia Episcopal Peruana, para que intervenga como mediador en el conflicto social que se inició en noviembre pasado, mientras que los opositores pidieron la presencia de Garatea en la mesa de diálogo.

Desde el 31 de mayo los pobladores de Cajamarca se encuentran en una huelga indefinida contra Conga, proyecto a cargo de la empresa Yanacocha y que prevé una inversión de 4.800 millones de dólares, porque sostienen que es inviable por los supuestos riesgos medioambientales que corren sus reservas de agua.

El Gobierno ha dado su beneplácito a la ejecución de Conga después de que Yanacocha aceptara las condiciones que impuso Humala para su desarrollo, como conservar dos de las cuatro lagunas, cuadruplicar sus reservas de agua, crear un fondo social y 10.000 puestos de trabajo.

La semana pasada, tras la muerte de cinco manifestantes en los violentos choques entre los pobladores y la Policía, el Gobierno decidió declarar en estado de emergencia (excepción) en las provincias de Cajamarca, Celendín y Hualgayoc, de la región Cajamarca por 30 días.