Sindicatos de la filial francesa de Fagor inquietos por el retraso en España

París, 14 mar.- Los sindicatos de FagorBrandt, filial francesa del fabricante de electrodomésticos Fagor, mostraron hoy su inquietud por el retraso de la adjudicación de las patentes en España, decidido por el Tribunal de Comercio de San Sebastián.

"Cuanto más tarde en solucionarse el asunto, más valor perderá la empresa", indicó a Efe un representante sindical, que lamentó que el dossier no avance más deprisa en España.

El Juzgado de lo Mercantil número 1 de San Sebastián desestimó la oferta de 25 euros del grupo argelino Cevital por las patentes de Fagor y pidió que subiera hasta los 35, como habían reclamado los acreedores.

Cevital está pendiente de poder hacerse con esas patentes para concretar su oferta de compra de dos de las cuatro factorías de FagorBrandt, lo que supondría salvar 1.200 de los 1.800 puestos que tiene el grupo en suelo galo.

La actividad de las factorías de la filial francesa están detenidas, después de que hoy parara la de Orleans, donde se fabrican hornos, la última que quedaba en activo.

El portavoz sindical señaló que el "precio de 35 millones por las patentes no es descabellado".

Recordó que en 2008, cuando Fagor se hizo con las marcas que pertenecían a Bradt, éstas fueron valoradas en 55 millones de euros.

Desde entonces, el grupo ha perdido cuotas de mercado, lo que a su juicio devalúa también el precio de las patentes, en concreto de Brandt, De Dietrich, Vedette, Sauter y Easycook.

Pero el representante de los sindicatos señaló que cuanto más tarden en adjudicar la empresa más cuota de mercado se perderá.

El grupo no tiene capacidad para comprar material y seguir produciendo, por lo que no puede servir productos a los clientes y, por tanto, está perdiendo visibilidad en las tiendas, explicó.

Pese a ello, el representante sindical señaló que "lo importante es que se pueda encontrar una solución que mantenga el mayor número de puestos de trabajo el mayor tiempo posible".

Cevital opta a hacerse con las plantas de Orleans y Vendôme, donde se fabrican cocinas de gas y vitrocerámicas, además de las oficinas logísticas de Reuil y Cergy, a las afueras de París.