Socialistas europeos piden a Barroso y Van Rompuy más ayudas para los jóvenes

Bruselas, 12 jun.- El presidente del grupo socialista en el Parlamento Europeo, Hannes Swoboda, pidió hoy medidas concretas para solucionar el problema del paro juvenil, en una carta a los presidentes de la Comisión Europea, Jose Manuel Durao Barroso, y del Consejo Europeo, Herman Van Rompuy.

Swoboda adjuntó a la carta las conclusiones de unas jornadas europeas organizadas por el grupo socialista bajo el título "Quiero un trabajo y lo quiero YA", en las que más de 200 jóvenes europeos pedían al Consejo y la Comisión también políticas concretas.

Una de las medidas más llamativas por parte de los jóvenes y que Swoboda adjuntó es la petición de "periodos de prácticas de calidad y regulados por leyes nacionales que aseguren unas condiciones laborales decentes".

"Se deben prohibir las prácticas para aquellos que ya hayan dejado de estudiar o las no retribuidas. Así, se evitará que se sustituyan trabajadores por becarios. Al mismo tiempo, se debe establecer un máximo de plazas por empresa", argumentan los participantes de la jornada.

En la carta remitida también se pide que los becarios tengan derecho a cobrar las horas extra, o compensarlas, así como los gastos que comporten las prácticas, como puedan ser comida, transporte o alojamiento.

Se pide, además, que el pago mensual de las prácticas sea como mínimo del 60 % del salario mínimo interprofesional de cada país.

A su vez, los rescates financieros también han hecho mella entre los jóvenes, que exigen a los presidentes del Consejo y la Comisión que pidan responsabilidades a las entidades bancarias.

"Si hay dinero para salvar a los bancos, ¿por qué no para nosotros? Queremos un presupuesto fuerte para becas, para programas de intercambio como el Erasmus y para medidas de empleo juvenil", señala la carta.

Swoboba también transmitió las críticas lanzadas por los jóvenes hacia la gestión de los fondos europeos: "Millones de euros de los fondos de la UE no se están gastando todo lo bien que se debería para combatir el desempleo juvenil", así como medidas a favor de la microfinanciación y el crédito para jóvenes.

Algunas de las medidas que también les llegaron a Barroso y a Van Rompuy mediante la carta de Swoboda son la creación de una prestación europea para los jóvenes que estén buscando trabajo, el establecimiento en las empresas de una cuota mínima para jóvenes y la dedicación de fondos públicos para contratos juveniles.