Un campesino queda herido en invasión de tierras en el norte de Honduras

Tegucigalpa, 23 abr.- Un campesino resultó hoy herido de bala tras el desalojo de centenares de labriegos de unas tierras cultivadas de caña de azúcar en el norte de Honduras, informó uno de los dirigentes de la movilización.

El hecho se registró en el sector de San Manuel, departamento norteño de Cortés, donde tres grupos de campesinos exigen al Gobierno que les otorgue unas 3.000 hectáreas de tierras, dijo a periodistas el dirigente Nectaly Zúniga.

Agregó que las tierras que ocuparon en horas de la madrugada de hoy, las que desalojaron tras el incidente en el que resultó herido un campesino, "son fiscales" pero que una empresa azucarera "se ha apoderado de ellas" desde hace varios años.

Zúniga dijo que el labriego que resultó herido en el estómago "está fuera de peligro" y acusó a los guardias de seguridad de la empresa azucarera de haberlos "agredido".

"Nosotros no portamos armas, lo único que llevamos son machetes y azadones para cultivar la tierra", expresó Zúniga, quien pidió la intervención de las autoridades del Gobierno para resolver el conflicto y advirtió que "continuarán las invasiones" porque los campesinos y sus familias tienen "hambre".

El dirigente señaló además que unas 1.500 familias de labradores distribuidas en tres grupos son las que reclaman tierras en el norte del país, donde la semana pasada en la misma zona hubo invasiones de campesinos que fueron desalojados pacíficamente por las autoridades.

El ministro director del Instituto Nacional Agrario (Ina), César Ham, dijo a periodistas que desde hace tres años la institución que rectora está en pláticas con empresarios para definir la situación legal de algunas tierras que grupos campesinos alegan que son fiscales.

Ham subrayó que el Gobierno que preside Porfirio Lobo continúa en el proceso de entrega de tierras con títulos de propiedad a campesinos organizados y pidió de nuevo a los grupos de labriegos que están invadiendo tierras que se apeguen a la ley.

El titular del Ina y empresarios locales acusan a Rafael Alegría y Juan Barahona, seguidores del expresidente Manuel Zelaya, de ser los promotores de las invasiones de tierra para desestabilizar al Gobierno de Lobo, quien asumió el poder el 27 de enero de 2010.

Alegría y Barahona rechazan las acusaciones y culpan al Gobierno por no agilizar la entrega de tierras a los campesinos.