Wall Street anota su mayor avance semanal del año

  • Wall Street anotó hoy su mayor avance semanal del año y sus tres indicadores de referencia acabaron por encima de barreras psicológicas desconocidas desde hacía años: el Dow Jones de Industriales sobre los 13.000 puntos, el selectivo S&P 500 sobre los 1.400 y el índice del Nasdaq sobre los 3.000.

Nueva York, 16 mar.- Wall Street anotó hoy su mayor avance semanal del año y sus tres indicadores de referencia acabaron por encima de barreras psicológicas desconocidas desde hacía años: el Dow Jones de Industriales sobre los 13.000 puntos, el selectivo S&P 500 sobre los 1.400 y el índice del Nasdaq sobre los 3.000.

A pesar de que este viernes acabaron el día sin apenas cambios, el Dow Jones se revalorizó un sólido 2,4 % estos cinco días y el selectivo S&P 500 el 2,43 % -los más pronunciados desde diciembre pasado-, al tiempo que el Nasdaq ganó el 2,24 %.

Así, pese al moderado retroceso del 0,15 % ó 20,14 puntos de la jornada, con el que interrumpió siete jornadas consecutivas al alza, el Dow Jones de Industriales acabó en las 13.232,62 unidades, sobre la simbólica cota de las 13.000 que reconquistó a finales de febrero por primera vez desde mayo de 2008.

Este martes fue el turno del índice compuesto del mercado Nasdaq, que plantó su bandera sobre la montaña de los 3.000 puntos, que no alcanzaba desde la burbuja tecnológica del año 2000 y sobre la que se mantiene al cierre de esta semana tras un leve retroceso del 0,04 % con el que se situó en las 3.055,26 unidades.

Por último, el selectivo S&P 500 hizo lo propio y el jueves cerró por encima de las 1.400 unidades, un nivel que desconocía desde junio de 2008 y que revalidó esta jornada tras un ascenso del 0,11 % que lo dejó en las 1.404,17.

Las tres grandes referencias de Wall Street se sitúan así en cotas desconocidas desde hacía años en un ambiente de optimismo entre los inversores sobre la evolución de la economía estadounidense, que da señales de revitalización en áreas clave como el mercado laboral.

Además, esta semana el parqué neoyorquino ha celebrado que Grecia pusiera fin a uno de los capítulos de su grave crisis después de conseguir que el Eurogrupo diera luz verde a su segundo rescate de 130.000 millones de euros, con el que ha evitado "in extremis" entrar en suspensión de pagos.

De hecho, la Unión Europea anunció este viernes que Grecia recibirá el lunes el primer tramo de ayuda de la eurozona y del Fondo Monetario Internacional, de 5.900 millones de euros.

Con esa larga y tortuosa etapa de la crisis griega cerrada, por ahora, los inversores neoyorquinos pudieron centrarse esta semana en las noticias nacionales, que en general fueron mejores de lo previsto y trajeron consigo además los resultados de las pruebas de estrés a la banca de Reserva Federal de EEUU.

Gracias a ese examen, que aprobaron 15 de las 19 entidades estudiadas, el sector financiero ha subido en su conjunto un contundente 4 % esta semana, en la que Bank of America y JPMorgan Chase han sido los grandes ganadores del Dow Jones.

El segundo de esos bancos tuvo mucho que ver en el rally vivido en Wall Street el martes pasado, ya que se adelantó a la difusión oficial de los resultados de las pruebas de estrés y filtró su aprobado, anunciando un aumento del dividendo que reparte entre sus accionistas y un masivo programa de recompra de acciones.

Otro de los grandes triunfadores de esta semana ha sido el gigante tecnológico Apple, que se ha disparado más de un 7 % gracias a la puesta a la venta hoy de su nuevo iPad, la tercera generación de su exitosa tableta, de la que se calcula que puede vender más de un millón de dispositivos solamente esta jornada.

Pese a que este viernes cerró plana, la compañía tocó el jueves por primera vez en la historia los 600 dólares por acción y se afianza como la empresa más valiosa del mundo con una capitalización bursátil que supera los 550.000 millones de dólares, lo que incluso ha despertado miedos a que una corrección pueda estar cerca.

La falta de tendencia de esta jornada se produjo tras la difusión de datos macroeconómicos mixtos sobre la evolución de la economía estadounidense, sobre todo porque las nuevas cifras ofrecieron señales de que el encarecimiento del petróleo y la gasolina puede amenazar la recuperación del país.

Y es que el IPC subió en febrero el 0,4 %, el mayor avance en diez meses -aunque en línea con lo previsto por los analistas-, y la confianza de los consumidores en la economía de este país retrocedió en marzo por primera vez en siete meses, ambos fruto de los elevados precios del combustible.

La semana que viene la agenda macroeconómica estará algo más tranquila, aunque se conocerán datos como el índice de tendencia futura de The Conference Board, pero la temporada de resultados empresariales revivirá de la mano de empresas como Oracle o FedEx.

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