24-m. Rajoy se da un baño de masas junto a monago a más de 30 grados

DON BENITO (BADAJOZ), 12 (SERVIMEDIA/IRENE RIVAS, ENVIADA ESPECIAL)

El presidente del Gobierno y del PP, Mariano Rajoy, se dio este martes un baño de masas en las calles de Villanueva de la Serena (Badajoz) junto al presidente de Extremadura y candidato popular a las elecciones autonómicas del 24 de mayo, José Antonio Monago. Con unos termómetros que superaban los 30º, Rajoy bromeó al asegurar que hacía “un frío espantoso”.
Rajoy llegó pasadas las 13.30 horas al Mercado de Abastos de esta localidad pacense acompañado de Monago y del vicesecretario general del PP, Carlos Floriano. Recorrió la calle San Francisco, repleta de carteles del PSOE de Guillermo Fernández Vara y de la Izquierda Unida de Pedro Escobar, pero el protagonista era él.
‘Selfies’ y besos al grito de “¡Mariano!” y “¡Presidente!” le llevaron a tardar casi media hora en recorrer apenas unos metros hasta el antiguo punto de encuentro del pueblo, el conocido como ‘Burrito’, donde en su momento se vendían melones, y donde hoy Rajoy y Monago posaron ante las cámaras rodeados de ciudadanos que aplaudían.
Sin embargo, cuando las decenas de ciudadanos que a pleno sol querían fotografiarse con el líder popular llamaban su atención lo hacían llamándole “Mariano”. Rajoy posó en instantáneas con mayores y, también con jóvenes, saludó a niños y fue cuidado por una mujer que no dudó en pedir al dispositivo de seguridad: “Ponedle en la sombra, que le vais a asfixiar”.
Los termómetros en este verano adelantado a mayo no mentían y Rajoy y Monago, vestidos con una camisa blanca que destacaba su pin con la bandera extremeña, acusaron el calor. “Hace un frío espantoso”, bromeó el presidente del Gobierno al saludar a la prensa.
Algunas señoras mayores instaban a gritar “¡Que viva España!” a otras, mientras Rajoy entraba a la Tapería Antonio a saludar a sus trabajadores y se paraba ante una tienda de granizados. Tampoco desperdició el saludo de cuatro mujeres que le llamaban desde una ventana.
Entretanto, el grupo de estudiantes que le esperaba en el punto de partida mientras el coche electoral del PSOE se dejaba ver y dejaba oír su himno, reconocía que no le gustaba Rajoy y que se quedaban “a cotillear”. Sin embargo, foto en móvil, no evitaron los nervios al compartir la instantánea “con el grupo de amigos”. “Un placer”, le respondían sin pudor.
Sólo algún ciudadano espontáneo puso de manifiesto que no le gustó tanto sorprenderse con el presidente del Gobierno en su paseo matinal o cuando iban a casa a comer. Una joven increpó a Rajoy al grito de “¡sinvergüenza!” pero, acto seguido, los simpatizantes que le rodeaban, taparon su protesta con aplausos y gritos de “¡presidente, presidente!”.
Además, un hombre desde su coche mientras pasaba por la glorieta por la que cruzó Rajoy antes de enfilar la calle peatonal Ramón y Cajal increpó al presidente al grito de “¡Corrupto!”. Fueron pocas más las voces críticas, aunque algunos no dudaron en reclamarle “¡un trabajo!”.
La acogida del segundo paseo de esta campaña electoral, después del que realizó en La Laguna (Tenerife), en la jornada en la que se suspendieron los actos por el accidente de Airbus, sorprendió incluso a la organización del Partido Popular.
Rajoy y Monago, tras un paseo de 40 minutos que terminó en la Plaza del Ayuntamiento, salieron hacia Don Benito, la localidad vecina de Villanueva de la Serena a la que el líder socialista, Pedro Sánchez, considera su ‘kilómetro cero’ en la carrera hacia la Secretaría General.

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