El juez Santiago Pedraz ha dictado un auto en el que decreta la libertad bajo fianza de 300.000 euros para Ángel María Villar, expresidente de la Federación Española de Fútbol (FEF); de 150.000 para su hijo Gorka Villar; y de otros 300.000 euros para el exvicepresidente económico Juan Antonio Padrón.
El juez les impone, además, la prohibición de salir de España, la retirada del pasaporte, así como la obligación de estar localizables permanentemente a través de un teléfono móvil.
El magistrado de la Audiencia Nacional entiende que los investigados ya no pueden obstaculizar la investigación, puesto que se han practicado los registros, ni influir en los testigos, que ya han prestado declaración en sede judicial.
Los tres implicados en la Operación Soule contra la corrupción en la Federación Española de Fútbol fueron detenidos este 20 de julio, acusados de desviar fondos de la selección. Así, Ángel María Villar habría desviado dinero de partidos de la selección española y lo habría empleado en beneficiar a su hijo Gorka.
Además, utilizaron a la selección española, vigente campeona del mundo en ese momento, en beneficio propio. Gorka consiguió que su padre obligara a la empresa organizadora de los partidos de la selección a aceptar a la selección de Corea del Sur como rival de España en un partido amistoso en 2012. La federación de ese país había firmado un contrato con la empresa de Gorka, que cobró por las gestiones con su progenitor 60.500 euros, según el juez Pedraz.
Por ello, el magistrado les ha acusado de administración desleal, apropiación indebida y/o estafa, falsedad documental y corrupción entre particulares.
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