CC.OO. y UGT preparan una movilización en Barcelona el 23 de marzo para reclamar empleo, pensiones y salarios "dignos"

CC.OO. y UGT de Catalunya han iniciado este jueves una campaña de asambleas y movilizaciones para reclamar empleo, pensiones y salarios "dignos" en el marco del calendario de movilizaciones a nivel estatal, que acabará el 23 de marzo con una acción de protesta en Barcelona en la que quieren visualizar todos los conflictos laborales abiertos.

Lo han explicado los secretarios generales de los dos sindicatos, Camil Ros (UGT) y Joan Carles Gallego (CC.OO.), en declaraciones a los medios antes de una asamblea conjunta de delegados para concretar las movilizaciones en Catalunya, que incluirán asambleas en centros de trabajo y concentraciones en diferentes ciudades.

Con estas protestas, los dos principales sindicatos pretenden presionar a la Ceoe para que desbloquee las negociaciones sobre las subidas salariales mínimas para los nuevos convenios colectivos --que los sindicatos sitúan en una horquilla de entre el 1,8% y el 3% y la patronal, en el 1,5%, aunque no lo ha planteado de forma oficial en la mesa de negociación--, así como también exigir al Gobierno una subida de las pensiones y medidas para garantizar un empleo digno y combatir la precariedad.

Ros ha argumentado que la propuesta extraoficial de la Ceoe de situar la subida salarial en el 1,5% es una "tomadura de pelo" teniendo en cuenta los incrementos del IPC, y ha alertado de que la creación de riqueza solo se está notando en las cuentas de resultados de las empresas, mientras que los trabajadores pierden poder adquisitivo.

Por su parte, Gallego ha considerado que los salarios deben incorporar una parte importante de los beneficios de las empresas, argumentando que lo contrario "no es justo para las personas y económicamente inútil" porque no incentiva la recuperación del consumo.

Ha insistido en que un empleo de calidad y unas pensiones y salarios dignos son la única solución para garantizar la cohesión social, y ha alertado de que los sindicatos están dispuestos a "pasar a la ofensiva", por lo que no descartan ningún tipo de acción.

"Si siguen intransigentes seguiremos movilizados y no descartamos ninguna medida de fuerza", ha sostenido.