La concejal de CHA en el consistorio de la capital aragonesa, Leticia Crespo, ha explicado en rueda de prensa que la filosofía de esta iniciativa es "repensar entre todos la ciudad y ver cuáles son las decisiones correctas para facilitar la autonomía" del consistorio después de que Zaragoza haya sufrido una "gran transformación" que no se ha incorporado al PGOU.
Crespo ha recordado que este último data de 2001 y, posteriormente, se han puesto en servicio la Z-30, circunvalación urbana conocida como Tercer Cinturón, y la Z-40 o Cuarto Cinturón, que es de tipo autovía.
Asimismo, ha detallado que el PGOU establece una definición de tramos urbanos y de travesía en las carreteras nacionales N-IIa, N-232, N-125 y N-330 a su paso por Zaragoza "que debe ser revisada" y ha indicado que se considera como travesía el tramo de la N-330 entre la calle Valle de Broto y el Puente de Santiago y de la misma carretera el tramo que hay entre la rotonda de Valdespartera regulada con semáforos y la avenida Casablanca y Gómez Laguna.
La concejal de CHA ha estimado que esto es un ejemplo de como el PGOU está "desactualizado" ya que son trayectos que "están desempeñado un papel diferente", entre los que también ha mencionado los existentes en la N-330 en Vía Hispanidad y Vía Ibérica, o los tramos de la avenida de Navarra y avenida de Cataluña.
Igualmente, los barrios de El Rabal y el Actur "están separados por una mediana" con una estructura y una zona arbustiva que hacen de "barrera" ya que las travesías "son zonas de paso" y no están diseñadas "para estar y vivir y por eso hablamos de menos ciudad", ha apostillado la concejal.
IMPACTO VISUAL Y JURÍDICO
Crespo ha sostenido que "quien vienen a Zaragoza quieren ver calles, no carreteras", para advertir del "impacto visual" que tienen esos tramos actualmente clasificados como travesías, además de las implicaciones jurídicas ya que las vías urbanas están reguladas por ordenanzas municipales y las travesías por la Ley de Carreteras.
En este punto, la concejal ha apuntado que los procedimientos administrativos para permisos de uso y actividades son diferentes, según se trate de una vía urbana o de una travesía.
También ha comentado que según la última reforma de la Ley de Carreteras, de 2015, la delimitación de los tramos urbanos deberá actualizarse cuando las circunstancias lo demanden y como máximo cada cinco años.
La edil de CHA ha dicho que las modificaciones que proponen haría posible eliminar los quitamiedos e instalar árboles y bancos y otros elementos "propios de la ciudad", otorgando autonomía al ayuntamiento en estas vías.
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