El cardenal Cañizares y el arzobispo Omella piden desmontar la "falsedad de los populismos"

  • Abren en Barcelona un simposio sobre jóvenes en la Iglesia con 37 conferencias episcopales
El cardenal Cañizares y el arzobispo Omella piden desmontar la "falsedad de los populismos"
El cardenal Cañizares y el arzobispo Omella piden desmontar la "falsedad de los populismos"
EUROPA PRESS
EUROPA PRESS

El arzobispo de Valencia, el cardenal Antonio Cañizares, ha llamado a desmontar la "falsedad de los populismos", en lo que ha coincidido el arzobispo de Barcelona, Juan José Omella, que ha observado que éstos crecen fácilmente cuando se vive en la riqueza individual y la falta de solidaridad.

Lo han dicho al ser preguntados por los medios antes de abrir este martes el simposio del Consejo de Conferencias Episcopales de Europa (CCEE) en Barcelona, en el que 275 participantes de 37 conferencias abordan de martes a viernes el acompañamiento que tiene que hacer la Iglesia a los jóvenes.

Acompañado también del arzobispo de Westminster y vicepresidente del CCEE, el cardenal Vincent Nichols, Omella ha apostado por que la sociedad se centre menos en los individualismos: "E ir desmontando también ése ambiente que se ha ido creando, de mentira y de corrupción, también entre nosotros".

También ha apostado por construir una sociedad en la que todo el mundo sea escuchado, trabajando por el bien común, "y no por el bien de un partido o de una ideología".

Nichols ha afirmado: "Ya sea político, internacional o local, si el liderazgo está basado en apelar a los miedos, no es un buen liderazgo, y diré: No os lo creáis. Un buen liderazgo siempre apelará a lo que es mejor en nosotros, no a lo peor."

LA IGLESIA Y LOS JÓVENES

Cañizares, también vicepresidente de la Conferencia Episcopal Española, ha defendido el papel que tiene la Iglesia ante los jóvenes, porque puede "desmontar la falsedad de los populismos" y ejercer una respuesta que sea a favor de los demás.

El arzobispo de Valencia ha esperado que los jóvenes se acerquen a la Iglesia porque, y lo ha justificado con un paralelismo con la basílica de la Sagrada Familia: "Nadie desde fuera puede imaginar la belleza" de su interior, y ha añadido que el simposio indicará a los jóvenes el camino que tienen que seguir.

Omella ha dicho que toda la Iglesia "en la Península Ibérica" comparte las mismas preocupaciones de contar con los jóvenes, y ha recalcado la necesidad de encontrar un nuevo método, lenguaje y un nuevo ardor para transmitir el evangelio, porque esto atrae, según ha dicho.

Nichols ha apostado por escuchar atentamente y tratar de entender lo que supone el mundo a los ojos de un joven en la actualidad, que afronta con "incertidumbre" una realidad que cambia rápidamente, y que se encuentra con una situación muy diferente a la que tenían sus padres a su edad.

El arzobispo de Westminster ha mencionado que en Europa, el mayor reto es la indiferencia, mientras que ha lamentado que en el continente hay miles de menores no acompañados, susceptibles al tráfico de seres humanos, así como la situación de los refugiados, y ha dicho que ante cuestiones existenciales como estas, los jóvenes tienen una gran creatividad y frescor, mientras que otros han perdido su visión.

Mostrar comentarios